Por cuarta vez, La Pedrera, ese balneario coqueto pero rústico habitado por un millar de personas y ubicado a unos cien kilómetros de Punta del Este, pasó a llamarse La Rockera. No es que las piedras hayan sido reemplazadas por rocas, sino por el rock del festival Voxpop: se dividieron los tres escenarios No Te Va Gustar, Buenos Muchachos, Martín Buscaglia, Dani Umpi y Closet, entre otros. ¡Puro rock uruguayo! Esta vez, y a diferencia de otras ediciones del festival, faltaron los albicelestes (en la edición 2006, Babasónicos y Catupecu Machu animaron el escenario principal).
"Estamos todos de vacaciones y este toque nos quedaba en el medio, por eso fue muy fácil llegar para nosotros", cuenta en el backstage Emiliano Brancciari, el cantante de los NTVG, que vinieron a encargarse del número principal y que no desilusionaron, con un show de cerca de dos horas en el que sonaron éxitos propios y prestados (Sumo, los Redonditos de Ricota y Jaime Roos). Como él, llegaron al predio del Voxpop unas cinco mil personas, que también estaban veraneando en las playas yoruguas. Antes de NTVG, los Buenos Muchachos, una legendaria banda de rock duro uruguayo, prepararon el caldo con distorsión y acordes desprolijos.
Mientras tanto, el escenario del Cabaret Pop era el lugar para los amantes de las plumas. Inaugurado por Sergio Dawi (el ex Redondo se sumó a los locales de La Vaca del Fondo), tuvo sus picos más altos con Dani Umpi, el electrokitsch que es número puesto de la Voxpop (que tocó en todas las ediciones) y para esta vuelta se vistió, junto a sus "securities" Bebe y Pichón, de Rey Mago, con coronita de cotillón incluida. "Voy a estar tocando mucho esta temporada", dijo ya debajo del escenario, aún con la cara pintada... ¡de fucsia! "Incluso voy a cantar en la presentación de una revista de la farándula". Luego de presentar un libro y un disco este año (Sólo te quiero como amigo, su primera novela; y Perfecto, un disco que sorprende por lo freak de la propuesta y lo bien que suena), Dani llega al verano con planes de más: "Estoy preparando otro disco, acústico, de versiones de otros grupos, de Valeria Lynch a Fun People... Es que donde ellos terminan, yo empiezo". Y, aunque es de Tacuarembó, vive en Montevideo y confiesa que es "re del centro", también admite que se inventa pequeños shows en el Este con tal de pasar la temporada en la arena ("por ejemplo, en el restaurante de una amiga").
Cerca de Umpi en lo conceptual, pero con menor grado de freakeada y más normalidad, los chicos de Closet aprovecharon para continuar presentando su primer EP, Dildo!, un puñado de temas con intenciones transgresoras. Cerró ese escenario la DJ Wanda Martin... ¿la otra Wanda? "¡Nada más lejos!", se desmarca la DJ, fan de Garbage y de Pulp. "Es molesto que me vengan a hablar de ella, pero bueno...". La historia de esta Wanda es la siguiente: toca mal la guitarra y canta mal, entonces decidió pasar música todos los fines de semana. En la Voxpop, lo suyo empezó con el rockabilly y llegó hasta la new wave.
Sin embargo, ninguno de estos nombres será recordado por unos cuantos fundamentalistas del dance, que eligieron la carpa de electrónica animada por Gastón Ackermann, Logiztik Sounds, Vivi Seixas y DJ Koolt. Sus beats sonaron hasta que salió el sol. Y fueron un buen refugio para terminar la noche rockera.