Pampita abrió las puertas de su casa para mostrar uno de los espacios más llamativos de su residencia en Nordelta: un jardín que combina lo mejor del diseño mediterráneo, la frescura tropical y criterios sustentables que reflejan su gusto por los ambientes equilibrados y naturales.
El espacio verde se destaca por su planificación visual y el uso estratégico del color, con una selección de especies que aportan textura, movimiento y vitalidad. La propuesta paisajística combina una estética moderna con un enfoque funcional, pensada para disfrutar en familia o relajarse al aire libre.

A simple vista, el jardín sorprende por la variedad de vegetación. Pampita optó por plantas ornamentales y florales de distintos tamaños y tonos, que se organizan en capas para generar profundidad y dinamismo. Los acentos violetas y rosados, inspirados en el estilo mediterráneo, se mezclan con hojas amplias y follajes finos que aportan contraste.

EL JARDÍN DE PAMPITA EN NORDELTA
El mobiliario también cumple un rol clave en la ambientación. Las piezas presentan líneas simples, materiales livianos y texturas suaves, en sintonía con las tendencias actuales de diseño exterior. La disposición de los muebles define zonas de descanso y encuentro, sin recargar el espacio y manteniendo una sensación de amplitud y serenidad.

En la entrada principal de la casa, Pampita apostó por dos grandes canteros de lavandas que, además de su aroma y color, actúan como barrera natural frente a los carpinchos de la zona. Junto a la puerta, una imponente maceta con una “ave del paraíso” y romero rastrero completa el conjunto, reforzando la idea de armonía entre estética y funcionalidad.

La modelo eligió especies adaptadas al clima local y un sistema de riego eficiente para reducir el consumo de agua, integrando materiales duraderos y naturales. El resultado es un jardín que no solo embellece su hogar, sino que también promueve un estilo de vida sustentable.




