Con la llegada de la primavera, las ganas de renovar el jardín y sumar color explotan. Pero si no tenés mucha experiencia con las plantas, elegir las especies adecuadas puede marcar la diferencia entre un rincón florecido y un intento fallido.
Por suerte, hay tres flores que nunca fallan y son perfectas para quienes recién empiezan: begonias, verbenas y no me olvides. Todas crecen fácil, resisten bien y regalan flores durante meses.
Begonias: elegancia y color en cualquier rincón
Las begonias son un clásico de la jardinería argentina. Se adaptan a la semisombra, así que podés ubicarlas en lugares donde el sol no pega todo el día.
El secreto está en usar tierra húmeda y con buen drenaje. No hace falta regarlas de más: solo mantené la tierra fresca, sin encharcar.
El resultado: flores pequeñas, súper coloridas y que duran toda la primavera y el verano. Son ideales para darle un toque elegante a cualquier espacio, desde un balcón hasta un cantero.
Verbenas: explosión de color y vida para tu jardín
Si buscás un jardín lleno de vida, la verbena es la opción. Florece a lo grande y soporta hasta el sol más fuerte del verano.
Podés sembrar las semillas directo en tierra suelta y bien soleada. El riego debe ser moderado, evitando el exceso de agua.
Además de sus flores de mil colores, la verbena atrae mariposas y abejas, así que tu jardín va a estar lleno de movimiento y naturaleza.
No me olvides: delicadeza y color en pocos días
El miosotis, más conocido como no me olvides, es perfecto para quienes buscan un toque delicado. Sus flores azules o lilas aparecen rápido y quedan bárbaras en macetas o jardineras.
Lo ideal es plantar las semillas en tierra húmeda y con buen drenaje, en un lugar donde reciba sol parcial. En poco tiempo, vas a ver cómo tu espacio se llena de color.
Consejos clave para que tus flores crezcan sanas
- Tierra y macetas: usá tierra suelta y con buen drenaje para evitar problemas de raíces y hongos.
- Sol: la mayoría de estas flores necesitan sol pleno o parcial. Fijate cómo da la luz en tu espacio y ubicá cada especie según lo que pide.
- Riego: mejor regar poco y seguido, manteniendo la tierra húmeda pero sin charcos.
- Combiná especies: mezclá estas flores con otras resistentes para lograr un jardín más colorido y variado.
Con estas tres especies, hasta los más principiantes pueden disfrutar de un jardín lleno de color y vida durante toda la temporada.