El furor por las californianas parece estar de vuelta porque muchas reinas del street style, entre desfile y desfile de la Alta Costura de París, las lucen nuevamente. Tal es el caso de la alemana Veronika Heilbrunner.
Es casi imposible pensar en ellas sin recordar los días de sol y playa. Su nombre lo dice todo, de hecho son las playas de California, donde hay muchos surfistas luciendo esta tendencia. Aunque, en su caso, el pelo se aclara de manera de natural como consecuencia de la exposición constante a los rayos del sol.
Por otro lado, el balayage va perdiendo seguidores. Se trata de una técnica mucho más precisa, iluminando la melena mechón a mechón, y el resultado es tan natural que a estas alturas parece aburrir un poco.
En cambio las californianas utilizan la decoloración en bloque, dando un estilo más salvaje, más excesivo y más juvenil. Además, una gran ventaja es que se aplican bien a casi todos los colores de cabello, desde los castaños más fríos hasta los rubios dorados, y son capaces de alegrar cualquier melena.
Además, aunque el balayage queda más natural, tampoco es del todo cierto. Este sería más discreto en comparación, pero la verdad es que las californianas imitan el desgaste que el sol y el agua de mar producen en el pelo de forma natural, así que no se ven nada artificiales.
Llevar californianas es como ser rubia pero sin serlo del todo, un gran truco para pasarse al lado de las blondies con algo de discreción.
Este estilo es muy favorecedor para todas las edades, siempre y cuando se elija un color adecuado, que armonice con el color de la piel y la textura del cabello, y que además brinde un aspecto saludable.
Son mucho más intensas y buscan el contraste, llegando al extremo con las mechas ombrè, y dan mucha luz al cabello. El resultado es un look cool, surfer y desenfadado.