Para muchas familias, el momento antes de la cena es el ratito ideal para rezar y mostrar agradecimiento.
Más que una costumbre, es una tradición de origen religioso que consiste en bendecir la mesa y agradecer por los alimentos que se van a consumir mediante una oración.
Normalmente es una persona la encargada de hacer este ritual mientras el resto acompaña y espera mientras dure para poder comenzar a comer.
En este contexto, una familia de Los Ángeles, California, grabó el hilarante momento en que el más pequeño de la mesa no pudo esperar más y se puso a comer con los ojos cerrados mientras hacía que rezaba.
William
Jeffrey y Shaina Suk estaban rezando antes de comer cuando se dieron cuenta de que su hijo estaba un poco impaciente por empezar.
La pareja no pudo evitar reírse a carcajadas por la impaciencia que mostró su pequeño al tener los ojos cerrados y tratar de unirse a la oración mientras se comía la cena creyendo que nadie se estaba dando cuenta.
Fuente: DPA.