Generalmente la cafeína se relaciona con una rica bebida como el café pero también puede ser una gran aliada en el ámbito de la belleza. Es un ingrediente cada vez más recurrente en los productos cosméticos, en tratamientos y terapias de relajación.
Las propiedades estéticas de la cafeína vienen dadas por su bajo aporte calórico y cuando se aplica sobre la piel tiene muchos beneficios, dice Catalina Manzor, kinesióloga y directora de la clínica Be Mom.
Manzor advierte que su uso en la industria de la belleza no está recomendado para todo tipo de personas. Debe evitarse durante el embarazo, cuando se está amamantando y en aquellas que tengan patologías no controladas como la hipertensión.
De acuerdo con varios estudios, la cafeína tiene la capacidad de interactuar con los folículos, ayudando a que el cabello crezca más rápido. El mayor efecto se logra al aplicarla de manera tópica, utilizando un champú que la contenga.
Además es un fuerte lipolítico, afirma Manzor. Por tanto, estimula la eliminación de las grasas localizadas y mejora el aspecto de la celulitis. Según ella, la clave para que los tratamientos anticelulíticos con cafeína funcionen está en su nivel de concentración. Por ello, los geles y las cremas que están en el mercado sirvan más bien para hacer mantenimiento.
Esta sustancia también es un excelente producto natural para exfoliar y eliminar las células muertas de la piel. Hay geles y jabones que la contienen, pero también se puede elaborar un exfoliante casero.
Otra de sus propiedades es que estimula la circulación sanguínea y por ello funciona muy bien para descongestionar, bajar la hinchazón y reducir las ojeras. Existen productos para el contorno de ojos elaborados con una fórmula a base de cafeína que están indicados específicamente para aliviar los ojos cansados, disminuir las ojeras, las bolsas y dar energía a la piel.