Gracias a la página , se supo sobre la llegada de la madre de Meghan Markle, Doria Ragland, a suelo británico faltando pocas horas para el inicio del gran evento: la boda real entre la actriz estadounidense y el Príncipe Harry en el Castillo Windsor.
Markle expresó a la prensa que se sentía bien y a gusto, cuando se le vio del brazo de su madre. Ragland se alojó en el lujoso Cliveden House Hotel. Antes de que su hija conversara con el gerente del hotel, para ver que la estadía se cumpliera sin problemas, la futura esposa de Harry saludó a la multitud afuera del recinto.
Por su parte, Harry manifestó no sentir preocupación por lo que ocurrirá mañana. Se encontraba con su hermano el Duque de Cambridge afuera del Castillo de Windsor, ultimando detalles de las nupcias.
El novio se veía relajado e incluso tomó un oso de peluche de uno de sus simpatizantes a través de las puertas. Hoy cada cual pasará la noche en hoteles separados. Se verán en la Capilla de San Jorge cuando el Príncipe de Gales, Charles, acompañe a Meghan por el pasillo mientras hace su último recorrido como mujer soltera.
La señora Doria conoció a la reina de Inglaterra Isabel II y tomaron el té en horas de la tarde. Sobre quien es la persona más importante en la vida de Meghan, se maneja que es instructora de yoga y trabajadora social. Mañana estará cerca de su hija para que todo salga a la perfección.
Harry pasará su última noche de soltería en el Coworth Collection's Coworth Park en Ascot. La novia se alojará en el mismo hotel de su madre, ubicado en una finca del National Trust en Taplow, Berkshire.