A los 53 años, Tom Cruise mantiene intacta su imagen juvenil. El reconocido actor de Hollywood cuida su físico con un riguroso entrenamiento para hacer frente a las difíciles proezas de sus películas de acción. Pero, por lo visto, el afán por parecer joven le jugó una mala pasada y se convirtió en la comidilla de los medios de todo el mundo.
La mega estrella asistió a la entrega de los premios BAFTA en Londres con un llamativo “nuevo” rostro. La imagen brillosa y las muecas rígidas de Cruise dispararon el debate y las especulaciones sobre un posible paso por el quirófano. La mayoría de los comentarios se inclinaron por una aplicación de botox en la frente y en los pómulos.
El renovado look del galán de Hollywood recordó la polémica que protagonizaron tiempo atrás Renée Zellwegger y Uma Thurman, quienes sorprendieron a todos con sus radicales cambios. Las actrices dejaron boquiabiertos al mundo entero y recibieron críticas por haber retocado sus rostros.