Un albañil brasileño de 59 años había sido dado por muerto en un accidente de tráfico pero apareció en su entierro después de pasar toda la noche bebiendo en un bar.
La confusión empezó luego de un accidente de tráfico en donde un hombre murió. La familia de Gonçalves reconoció ese cadáver como suyo y estaban en pleno velatorio cuando el hombre apareció borracho pero vivo, claro.
Nunca protagonizó ningún accidente ya que había pasado toda la noche tomando cachaça (aguardiente de caña) con los amigos.
Gonçalves se enteró de que su familia lo estaba velando a través de un amigo que le avisó la noticia después de escucharla por la radio.
El gerente de la funeraria, sorprendido, afirmó que algunos de los familiares tuvieron dudas a la hora del reconocimiento, pero una de las tías y cuatro amigos confirmaron equivocadamente la identidad del muerto.
Ahora, el albañil va a tener que comprarse ropa y una cama nueva porque el dueño del departamento en el que vivía, uno de los que reconocieron el cadáver, había quemado todas sus pertenencias.