Hace poco hablaba con una amiga acerca de los cambios que internet trajo en cuanto a las relaciones, vínculos en general y principalmente, si de parejas y ex parejas se trata.
Por citar un ejemplo, hace algunos años cuando alguien se separaba, el sólo evitar "discar" su número en el teléfono fijo lo mantenía a salvo de caer en las tentaciones non sanctas para su mente y salud psíquica.
Ahora, además de no marcar send luego de un SMS en nuestro celular, debemos asegurarnos de borrarlo de todo medio virtual posible. Un simple delete en su nick (del msn, facebook, fotoblog, blog, uff...) y quien hasta hace poco era imprescindible en nuestro día a día, pasa a ser historial (aunque no siempre historia).
Es que sin dudas, internet abrió un nuevo mundo, o uno paralelo. Mucho se habla de cuánto modificó los vínculos, y cuanto ayuda a crearlos así como también a deteriorarlos. Es una herramienta al servicio de todos, cada cual sabrá como manejarla o si es ella quien termina por manejar a quien la utiliza.
"Enredados", el nuevo libro de Valeria Schapira, brinda un pequeño instructivo para debutantes en seducción virtual. Allí, específicamente, la autora habla acerca de cómo conseguir pareja en Internet y para ello brinda datos, técnicas de levante y consejos para protegerse en un medio que cada vez es más utilizado para generar nuevos vínculos.
"Soy una adicta a Internet. Por eso, comencé a estudiar conductas y las cosas que pasan en la red y vi que era un universo aparte", comentó la periodista.
En su nuevo libro se pueden encontrar capítulos dedicados al Chat, el mail, los bloggers, los floggers, los piratas informáticos y las citas. También incluye historias de navegación, con la visión de una mujer que ronda los 30 y pico, sin deseos de dar muchas vueltas para conocer a un candidato virtual.
"Mi libro apunta a la generación de personas de 30; a los que tienen ese prejuicio generacional de decir no se puede conocer gente por Internet ". A ellos, les digo que sí, que se puede hacer un casting de posibles candidatos en la comodidad de su casa, con un pote de helado en la mano y en pantuflas".
Total, la foto la retocamos, nos ponemos bien lindas y el que está del otro lado, solo se enterará si es que decidimos traspasar el próximo escalón: realidad real.
Con respecto a este tema, "el libro explica los cómo, los por qué, los cuándo y los dónde. En el espacio virtual los tiempos se acortan y hay que verse en persona, porque la fotito, muchas veces retocada, es muy linda pero te llevás una desagradable sorpresa cuando en la mesa de un bar te encontrás con Shrek ", concluye Schapira sin dejar de reírse de sí misma.