El escándalo del Wandagate volvió a sacudir el mundo del espectáculo argentino. Esta vez, Wanda Nara decidió tomar la palabra, pero no con declaraciones explosivas, sino con una jugada inesperada: desarchivó fotos y posteos románticos junto a Mauro Icardi de octubre de 2021, justo cuando la China Suárez aseguró que tuvo su primer encuentro romántico con el futbolista en París.
La polémica se reavivó después de que la actriz y el delantero dieran entrevistas con Moria Casán y Mario Pergolini, donde la China reconoció que su primera cita con Icardi fue en un hotel de París y confirmó detalles que Wanda había contado en pleno escándalo.
Sin embargo, la actriz sostuvo que el futbolista estaba separado en ese momento, algo que la mediática salió a desmentir de manera contundente.
La estrategia de Wanda: fotos, recuerdos y mensajes para dejar en offside a la pareja
En las imágenes que Wanda Nara volvió a mostrar en sus redes, se la ve junto a Mauro Icardi en plena complicidad y con mensajes de amor, dejando en claro que no estaban separados en octubre de 2021.
Por esos días, la mediática se encontraba en Milán con su hermana Zaira Nara, mientras el futbolista y la China Suárez coincidían en París.
La empresaria también recordó que, en ese entonces, expuso conversaciones privadas con la China Suárez, donde no solo hablaban de Mauro, sino también de la familia que Wanda había formado con el jugador. Así nació el Wandagate, con la actriz asegurando que fue víctima de las mentiras de Icardi.
Un escándalo que no termina: idas, vueltas y nuevas confesiones
Entre 2022 y 2024, Wanda Nara y Mauro Icardi intentaron recomponer su relación, pero no lograron dejar atrás las heridas. Incluso, la mediática mostró chats donde el futbolista le rogaba una reconciliación. Ahora, cuatro años después de aquel escándalo, la China Suárez y Mauro Icardi llevan casi un año de novios.
En sus recientes declaraciones, la actriz contó que habló con su pareja sobre las supuestas mentiras de 2021 y que pudieron resolverlo. Sin embargo, la jugada de Wanda Nara de desempolvar viejos recuerdos volvió a poner en el centro de la escena las contradicciones y las heridas abiertas de una historia que parece no tener final.