Doce de los más grandes fabricantes automotrices del mundo unirán sus fuerzas en China, para el lanzamiento de un novedoso servicio de vehículos eléctricos compartido.
Didi Chuxing, empresa a cargo de esa importante misión, es responsable además de la aplicación que permitirá a los usuarios de esas maquinarias, ejecutar el nuevo esquema acordado.
El servicio de uso compartido de vehículos eléctricos incluirá a la poderosa alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, al igual que el fabricante chino de autos eléctricos, BAIC BJEV.
También estarán presentes Ford Changan Automobile Group, Zotye Automobile, Chery Automobile, Geely Auto, KIA Motors, entre otros.
Dentro de su amplia red automotriz, Didi Chuxing mantiene 260.000 vehículos eléctricos, confiando en llegar a la ambiciosa meta del millón para principios del año 2020.
Entre esta gran compañía y los gigantes del mercado: Renault, Nissan y Mitsubishi, se planteó evaluar los problemas que enfrenta el suministro de modelos de baterías para automóviles totalmente eléctricos, que va incluido en el servicio de uso compartido.
“La cooperación se ajusta a la expansión de la alianza en la electrificación de vehículos, la autonomía, la conectividad y los nuevos servicios de movilidad”, expresó Ogi Redzic, vicepresidente senior de Vehículos Conectados y Servicios de movilidad para Renault-Nissan-Mitsubishi.
Según las cifras que maneja Global Market Insights, se valoró el mercado mundial de automóviles compartidos en 16.5 mil millones de dólares para el año 2024, comparado con los 1.2 mil millones del 2015.
Esto permite calcular un crecimiento consecuente e imparable de este negocio, al menos en territorio chino.
Para los fabricantes de autos, este nuevo fenómeno los ha impulsado a ofrecer lo que consideran son sus esquemas de vehículos compartidos, y con ello revolucionar el mercado al mismo tiempo.
En el caso de la empresa alemana Daimler AG, se sabe que cuenta con su servicio Car2Go, mientras que la BMW opera con DriveNow.
Así que el trío Renault-Nissan-Mitsubishi, con su inversión de mil millones de dólares, tendrá que trabajar sin descanso para que en los próximos cinco años pueda estar totalmente adaptado a los cambios de esa importante industria mundial.