La serie española La Casa de Papel, producida inicialmente por Atresmedia para Antena 3 y transmitida en varias partes del mundo por Netflix, es uno de los títulos del momento en la plataforma streaming y ha tenido un interesante éxito.
Grandes interpretaciones, diálogos y musicalización son algunos de sus elementos más atractivos. Sin embargo como todas las demás producciones de este tipo, también afrontó algunos problemas en sus rodajes y detalles curiosos que se esconden detrás de su rotundo éxito.
La Casa de Papel no era su nombre inicial
En un principio se llamó “Los Desahuciados”. Luego de discusiones y debates, sus creadores optaron por el nombre que ya conocemos. Aunque obviamente no hubiese influido en la calidad del producto, el nombre final es mucho más atractivo.
Tiene parentesco con Vis a Vis
La Casa de Papel es prácticamente hermana de la también serie española Vis a Vis. Los productores ejecutivos son los mismos y el estilo de ellos se hace notar mucho. Sobre todo en locaciones y los actores escogidos.
Cambio de nombres
Oslo, Moscú y Nairobi primero se iban a llamar Valencia, Chernóbil y Camerún. Se desconoce el porqué decidieron decantarse por los primeros, pero ya que conocemos la historia es difícil imaginar otros nombres para esos personajes.
Berlín sufre de una enfermedad que no existe
Berlín debe inyectarse un medicamento constantemente para detener el avance de una enfermedad que le afecta los huesos. En la realidad dicho padecimiento no existe, pero si hay uno muy cercano que es conocida como miopatía mitocondrial que degrada la potencia de nuestro sistema muscular.
ABC colaboró con el rodaje de una escena
Cuando tocó el turno de rodar la escena donde se imprimen los billetes, la producción trabajó arduamente para reconstruir los espacios de la Real Casa de la Moneda de España. El periódico ABC colaboró y prestó su sede para hacer esta adecuación, incluso se imprimieron billetes en papel periódico.
Netflix lo puede todo
La Casa de Papel inicialmente se pensó sólo para Antena 3, luego con la compra de Netflix se tuvo que ajustar su formato y sus dos temporadas de 9 capítulos pasaron a 15 capítulos.