Tenía que suceder. Las nuevas formas en que la música se difunde -entre tantas polémicas- genera la ilusión de que los verdaderos talentos encerrados en sus habitaciones, ya sin los intermediarios (interesados) corporizados en las discográficas y la prensa, finalmente pueden encontrar a sus fans directamente en Internet. Colgando una canción en MySpace, mediante la venta de tracks en las tiendas virtuales como iTunes, difundiendo sus giras y armando una "fan mailing list", es decir, una vía de comunicación directa con los fans que también disfrutan al poner una banda en la cima. Porque realmente es el público el que elige sus estrellas. Una (sensación de) democracia virtual que tiene correlato en el mundo de los negocios.
Atentos al tráfico de música -legal en este caso- en los sitios de descarga más allá de las disquerías, el organismo que regula todos los ránkings en Inglaterra (Official UK Charts Company) desde enero estableció nuevas reglas que promovieron un récord: por primera vez en la historia una banda independiente, sin sello discográfico y ni siquiera un disco (casero) en la calle llegó el domingo pasado al top 40 de la lista de los singles más bajados de Internet.
Son los Koopa, un trío de adolescentes rockeros punky que todavía no lo pueden creer. Porque en la lista, liderada por Leona Lewis (ganadora de un reallity de música), son los únicos que no tienen más apoyo que el de sus fans en Internet para haber alcanzado el puesto 31. Junto a artistas como DJ Eric Prydz, la inglesa Mika, el rapero Just Jack y las chicas de Booty Luv, entre muchos otras jóvenes promesas.
Con la actitud de Green Day y Blink 182 más el típico sonido brit, los Koopa -dos hermanos y un amigo- colgaron el hit Blag, Steal & Borrow en su página web oficial, que recibe algo así como mil visitas por semana e invitaron a sus fans a bajarlo por 77 centavos de libra, transacción que también se puede realizar por mensaje de texto. Y la respuesta fue tal que hicieron historia, una historia que comienza en la ciudad de Essex, no hace tanto tiempo.
Mirá el video del track récord: Blag, Steal & Borrow
Precoces, los hermanos Ollie and Stu Cooper cambiaron pronto los juguetes por el rock. A los 12 Ollie ya componía canciones y a los 15 -en 2002- decidió darle forma a sus letras y sumó a su hermano a la batería y a un amigo de éste, Joe Murphy (que además tenía un pequeño estudio) en el bajo. Las 5 o 6 canciones que inauguraron Koopa impactaron en la escena local, donde un link los une a los también ingleses McFly y Busted. Hoy ya van por su segunda gira y disfrutan de la fama que -Internet mediante- los dejó a la vista del mundo. "No es tan fácil como la gente piensa, inclusive con las nuevas reglas. Tienen que ser ventas reales para aparecer en el chart", le dijo el cantante y bajista Joe Murphy a la BBC.
Mientras tanto, más o menos al tanto de la noticia -es lo de menos- el mismo domingo del récord el padre de los hermanos Cooper sufrió un infarto fatal. Y una nueva historia comenzó en la vida de estos jóvenes músicos, ídolos para sus fans y ejemplo para toda una generación que va más rápido que los que imponen las reglas.