En los primeros días de octubre, Rufina (6), la hija de China Suárez (27) y Nicolás Cabré (39), tuvo una cirugía programada a raíz de una hernia inguinal. Pasado el difícil momento, el actor de Tu parte del trato recordó la dura escena con la pequeña.
"Fue una cirugía simple y hacen diez mil de esas operaciones por minuto. Pero bueno, uno es padre, fue incómodo y horrible. Es parte de aprender a ser papá, de tener que vivir estas situaciones, ponerle el pecho y entender que Rufina también entiende y le tenés que ser sincero, sentarte y explicarle todo”, contó en Agarrate Catalina, ciclo radial de La Once Diez.
“Contenta no se puso, pero lo entendió y fue mucho menos caótico de lo que esperaba. Es parte de hacerlos crecer y de que ella sepa que nunca le vas a mentir. Es otra de las pruebas que tuvimos".
“Contenta no se puso, pero lo entendió y fue mucho menos caótico de lo que esperaba. Es parte de hacerlos crecer y de que ella sepa que nunca le vas a mentir. Es otra de las pruebas que tuvimos", agregó Cabré.
El actor también habló del excelente vínculo entre Laurita Fernández y la pequeña. “Veo la buena relación que hay entre ellas como algo normal. La clave es que siempre tuvimos claro con la China que la prioridad es Rufina, que esté rodeada de amor. Siempre tratamos de correr los egos y lo fundamental es que ella esté cuidada. Tanto en la casa de su mamá como en la mía, está rodeada de amor y todos la cuidan, y los dos agradecemos eso", aseguró.
"Fue una cirugía simple y hacen diez mil de esas operaciones por minuto. Pero bueno, uno es padre, fue incómodo y horrible. Es parte de aprender a ser papá, de tener que vivir estas situaciones, ponerle el pecho y entender que Rufina también entiende y le tenés que ser sincero, sentarte y explicarle todo”.
"Amo que Rufi y Laurita se amen, festejamos que mi hija viva rodeada de amor y eso lo agradecemos mucho. Mi prioridad es Rufina, llevarla al colegio y no desaparecer de su vida. Ella me acompaña a grabar y le pone el pecho, disfruto mucho de lo que hago. Ella me acompaña en mi trabajo y lo disfruta también, se hace nuevos amiguitos...", agregó.
"Por eso acepto propuestas de dos o tres meses de duración. Si no me empieza a preocupar el tiempo que no puedo compartir con ella. Me doy cuenta de que no la puedo llevar a natación y eso me pone mal", completó.