Un juego que propuso el programa STO en el que Martín Baclini debía “ordenar las prioridades” terminó en un gran revuelo. El participante del Súper Bailando agrupó a Luciana Salazar (su amiga) y su pareja, Cinthia Fernández en un mismo lugar y las repercusiones no tardaron en llegar.
Indagada por esto, la bailarina defendió a su novio en una nota para Siempre Show (lunes a viernes a las 20 por Ciudad Magazine): "Yo quiero que entiendan que para mí es un juego. Evidentemente es obvio que me agarra en un buen momento de la relación. Si me agarraba en la época que me estaba matando con Luciana, era como un problemita en la pareja. Hoy no porque yo sé lo que es Martín conmigo y lo que hace por mis hijas y por mí".
"Martín me conoció en el peor de los estados, en el peor momento y tuvo que fumarse un montón de cosas. También tuvo que contenerme, cambiarme, ayudarme y apoyarme. Sé lo que él es conmigo y la prioridad que tengo en su vida y también lo sabe su familia porque se lo ha dicho en la cara a su mamá y a su papá en charlas re lindas que tuvimos todos en almuerzos o cenas", agregó.
Por otro lado, dejó en claro que el juego no le significó un malestar en particular: "Yo sé que él no podía quedar bien parado en ninguna situación. No puede poner a su laburo en el último lugar. Marcelo (Tinelli) lo salvó de una crisis enorme, sus papás son sus papás. Que haya puesto en un grupo a sus amigos y a su novia a mí no me cambia en nada".
Fue entonces que Clarita Douradihna, cronista del ciclo, hizo la pregunta de rigor: “A mí me hizo ruido que haya dicho que los amigos son para toda la vida y el amor no”. A lo que Cinthia se sinceró: “Sí, fue una frase desafortunada”.
"Yo le dije 'no coincido, para mí te equivocaste en esto. Sé lo que pensás de mí y lo que sos conmigo, pero estuviste mal'. Y me respondió 'lo que pasa es que salgo de ahí y me olvido lo que digo'. También hay que entender que no es del medio Martín", cerró.