En las telenovelas hay casamientos que ponen punto final a la historia, bodas que sirven de broche de oro para la consumación del amor de sus personajes. Después están las otras. En Los ricos no piden permiso hubo vestido blanco, "sí, quiero" y beso, pero de felicidad, nada.
Los deseos de Laura (Viviana Saccone) se cumplieron y después de muchos intentos para interferir en el amor que sienten Antonio (Juan Darthés) y Julia (Araceli González), logró casarse con el mayor de los hermanos Villalba.
Al mismo tiempo que se desarrollaba la ceremonia, en la que el personaje de Darthés no podía parar de recordar los momentos de plenitud que había vivido con Julia en el mismo instante en el que se estaba casando con otra, el rol de Araceli intentaba tomar fuerzas para interrumpir la boda. Impotente, la maestra termina llorando desconsolada, mientras él reafirma su decisión de comprometerse de por vida con la villana del triángulo amoroso. ¡Un sufrimiento total!
¡Mirá la tremenda escena de Los ricos no piden permiso!