Fue nominado casi una decena de veces al Martín Fierro y, si bien nunca ganó sus ternas, fue reconocido con una estatuilla a su extensa trayectoria en televisión. Artista de otro tiempo, el consagrado actor y director plantó bandera y marcó distancia frente al concepto de la fama, entendido como valor en sí mismo.
"¿La fama qué es en definitiva? No es nada. ¿Qué, de pronto, te reconozcan? No es más que es eso, no te aporta nada al trabajo. Tal vez algunas ventajas, pero a mí no me aportó nada".
“¿La fama qué es en definitiva? No es nada. ¿Qué, de pronto, te reconozcan? No es más que es eso, no te aporta nada al trabajo. Tal vez algunas ventajas, pero a mí no me aportó nada”, aseguró Puig, en una entrevista para el diario Clarín. Arturo recordó también su papel en Grande Pá, rol que quedó marcado a fuego en el inconsciente colectivo argentino.
“Salgo a la calle y la gente me pide por favor que vuelva a hacer un programa como ese. ‘Grande, Pá’ es el saludo de todos los días. No sería descabellado que vuelva”, deslizó, aunque aclaró: “No hay oferta concreta, pero yo no haría un remake basada en las edades que tenemos ahora y con el mismo elenco. Funcionaría”.
Además, ya en un plano más íntimo, Puig se refirió a y la muerte. “Me pusieron un marcapasos y estoy muy bien. Me desconecté de la vida, pero no vi la luz (se ríe). Me di cuenta que somos muy frágiles”, aseguró. “No tengo deseos de inmortalidad, a lo sumo si fueran inmortales mis seres queridos… Pero prefiero seguir el curso de la vida. Creo que cuando te morís, pasás a un estadio mejor. Que te reencontrás con tus seres queridos. Lo creo”, completó.