Horacio Cirio intenta rehacer su vida. El hombre quiere dejar atrás todos los escándalos y peleas vividas con su hija Jésica Cirio. Y admás intenta disfrutar de su mujer Marcela y de su bebé Tiziano de la mejor manera posible.
Por este motivo, Horacio -ante el difícil trance económico que pasa- buscó nuevo trabajo. Y puso un puesto de churros en la puerta de Pop Radio 101.5, en Uriarte y Nicaragua, para ganarse la vida. Mientras sigue reclamando parte de la casa de su ex mujer, el mediático padre recibió el apoyo de Beto Casella, quien le hizo promoción en su programa Bien levantado.
¿Cómo le está yendo en su primer día? ¡Muy bien! Cirio vende a 10 pesos la docena y ya es furor entre los vecinos.
AM, programa conducido por Verónica Lozano y Leo Montero, estuvo en el lugar y habló con Horacio: “Estoy trabajando, como tiene que ser. Es un emprendimiento que inicié hoy. Al puesto lo puse acá porque me dio la posibilidad Beto Casella. Me está dando una mano muy grande y le agradezco mucho”, dijo el padre de la modelo.
Sobre su hija, Horacio prefirió no hablar del tema: “Yo creo que Jésica va a tomar bien esto. Estoy trabajando. Mi relación con ella está como siempre: no hay. Pero prefiero no hablar de ella”.
Y, por último, concluyó: “Churros Don Cirio sigue en Mar del Plata, eh”, aventuró.
Hay churros para rato señores…