, el catalán que hizo famoso por irrumpir en eventos de todo tipo, saltó este domingo al campo de juego del Soccer City de Johannesburgo, donde se jugaba la final del Mundial de fútbol Sudáfrica entre Holanda y España, minutos antes de que los equipos salieran a escuchar los himnos.
Disfrazado con su típica barretina, el saltador recorrió gran parte del terreno y llegó hasta la destinada al ganador. Pero, quizá por nervios, se resbaló antes de tocarla y fue reducido por los guardias de seguridad y sacado de la cancha a la fuerza. Y parece que la broma le puede llegar a costar unos 300 euros de multa.
El famosos Jimmy ya tiene experiencia en estos trascendentales eventos deportivos, se ya que se dejó ver en la final de la Eurocopa de 2004, en la final de la Liga de Campeones de 2007 y en otros muchos partidos.