Una ecuación simple diría lo siguiente: si alguien es groso (de esos que hacen historia), imitar lo que hace supondría cierto talento y dificultad... por lo que este acto sería de respetar y a mayor parecido- mayor talento, sería una ecuación adecuada. Hacerse exitoso con estilo ajeno-propio es algo que a veces trasciende la barrera del tributo. De este fenómeno se ocupa bandastributo.com, lo que demuestra el arrastre de este estilo y que bandas argentinas de estas características han crecido hasta llenar teatros y estadios de Argentina y el mundo.
Algunas de las que hacen su propia historia apelando a la de otro, se vuelven una buena alternativa a la hora de elegir un show. A Pink Floyd no lo imita solamente los Umma, sino que The End también es alternativa. Otras son más conocidas como Dios salve a la reina (Queen) o los famosos Beatles criollos, conocidos en todo el mundo: Danger Four y The Beats.
La lista es larga y variada: Rey Lagarto (The Doors), Helium (Led Zeppelin), Géminis (Bee Gees), Los guantes del pibe (Rush), Cureosa (The Cure) y una larga lista. ¿Lo nacional? También tienen su espacio bandas como Soda Stéreo con Sobredosis de Soda, los Redondos y Sumo. También es conocido el fenómeno sabinero de Buenos Aires. L a lista es inabarcable en su totalidad, pero algo es seguro: shows para disfrutar... hay para rato.