En un intento por alejarse de su adicción a las drogas y al alcohol, la cantante ahora se muestra obsesionada por las cirugías estéticas, según publica el diario británico The Sun.
No conforme con el implante de silicones, por el que pagó 60 mil dólares ahora planea someterse a una nueva cirugía para mejorar su cola. "Amy está enamorada de sus pechos. No puede parar de tocárselos y mostrárselos a sus amigos", declaró una fuente allegada.
"Ella dice sentirse nuevamente más femenina y quiere mostrarse con más curvas como en el pasado. Cree que con otra operación de implante de cola logrará su imagen soñada de chica pin-up", agregó.
Winehouse, de 26 años, ha luchado en los últimos años contra una fuerte adicción a las drogas y el alcohol que puso en peligro su carrera profesional y que la obligó a pasar al comienzo del año una temporada recluida en la isla caribeña de Santa Lucía.