Un israelí acaba de grabar un disco usando solamente un celular, su voz y su guitarra. Hablamos con él y nos contó los pormenores de este nuevo uso de los teléfonos móviles. ¿Será la extinción de las salas de grabación?
Primero fue Gorillaz, una banda compuesta por dibujitos animados, después vino el primer concierto virtual realizado a través de Second Life de la cantante Suzanne Vega (ver video). Hace quince días se exhibió un videoclip hecho de principio a fin con un teléfono celular y justo en ese momento en los que se cree que ya nada más puede ser inventado, aparece alguien empeñado en seguir violando la capacidad de asombro colectiva.
Ahora, la novedad es que ese aparato, que se inventó para poder dialogar con otra persona a la distancia (algo que de por sí, sigue siendo sorprendente) y que con el tiempo se ha convertido también en cámara de fotos, videograbadora, agenda, despertador, GPS y tantas otras funciones más, puede ser usado como estudio de grabación. Omri Levy, un músico israelí que lleva dos discos editados, ha plasmado 10 canciones, que tenía guardadas desde hace rato, usando como único medio su Nokia N80 y el software Alon MP3 . El álbum se llama About: blank y puede bajarse gratuitamente de Internet, como toda la discografía de Levy, para quién la música debe compartirse.
"Desde que me compre el móvil empecé a pensar cómo podía aprovecharlo para hacer música, me encantan los gadgets y siempre ando buscando nuevas aventuras", confiesa Omri por teléfono desde su país a Ciudad.com. "Hacerlo tuvo sus complicaciones, porque la calidad del sonido no es buena, pero me gustan las limitaciones, para dejar sólo lo básico, hacer algo bien intimista, por eso se llama así: es el punto de inicio de una canción y eso es lo que quise mostrarle al mundo. Si oís los temas te das cuenta de que es alguien en una casa, con su guitarra y nada más", agrega Omri, que está convencido de que muchos lo imitarán.
"Las personas me van a seguir. Además, los teléfonos se están volviendo cada día más sofisticados, se pueden conectar con wifi, son como pequeñas computadoras. Ya se va a poder grabar con una calidad muy buena" asegura entusiasmado. Explica que él, por el momento, tuvo que conformarse con lo que hay: "El disco dura simplemente 17 minutos porque sé que es difícil escuchar algo así, si es muy largo, estoy al tanto de que suena bastante mal y por eso hice canciones cortas, pero al menos quería demostrar que se puede hacer música sin tener nada de plata para gastar".
La idea es original y obviamente una noble predica, pero ahora sí, después de esto no se puede inventar más nada...¿o sí?.
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