La premisa de Flavio Mendoza de innovar e invertir en cada uno de sus espectáculos se mantiene contra viento y marea, y este año El Circo del Ánima se repuso en tiempo récord al temporal que le destrozó la enorme carpa de última generación.
En una charla íntima con Ciudad, Flavio se explayó sobre el rol empresario al que le pone la misma intensidad que a la crianza de Dionisio, su hijo de 7 años, que le enseña sobre fútbol, a la vez imagen del circo. También explicó por qué no volvió a formar pareja, la desesperada tarde en Nogoyá en la que le hizo una plegaria a Dios y qué
“El show es totalmente nuevo. El año pasado estuve acá en Buenos Aires y debutamos este espectáculo en Córdoba Capital, después hicimos Santa Fe, con un exitazo increíble”, cuenta Flavio a Ciudad desde el borde del escenario montado en el estacionamiento del Casino Buenos Aires.
-A mediados de mayo un temporal de lluvia y viento destrozó no solo la carpa sino también equipos electrónicos. ¿Cómo hiciste para reponer todo tan rápido?
-La verdad que fue una gran inversión. Porque no se pudo hacer una nueva carpa, sino trajimos a dos personas del extranjero que manejan este tipo de lona especial que se llama Ferrari, que es como metálica. Pero yo antes muerta que sencilla. Con mi familia dicidimos encargar una nueva Europa, porque este circo está todo este circo está hecho en Italia.
-¿Crees que vas a poder recuperar lo que te costó la reparación?
-Más allá de todo lo que siempre nos pasa en el país, yo soy un afortunado, la gente me dice “sí” a los espectáculos. Es una inversión tan grande que la gente la ve, y eso es lo que a mí me enorgullece como artista y como empresario. ¿Sabés cuánta gente me dice a mí, “es barata la entrada”? Eso es loco. La verdad que estoy muy orgulloso.
A esta altura Flavio es un verdadero empresario, ya que tiene unos 35 artistas en escena, pero la cifra escala a alrededor de 120 empleados si se suman los técnicos, maquilladores, productores o boleteros.
Flavio MeEndoza.“Es una inversión tan grande que la gente la ve, y eso es lo que a mí me enorgullece como artista y como empresario. ¿Sabés cuánta gente me dice a mí, “es barata la entrada”? Eso es loco”.
De hecho, cada vez que traslada su circo de 1.800 butacas lo hace en 50 camiones con acoplado. “Estoy muy feliz, porque logré un equipo de artistas muy bueno”, celebra.
“Este show tiene mucha técnica, mucha técnica. Es una tecnología superior a todo lo que yo vine haciendo. Mirá que yo fui a ver todos los espectáculos de calle Corriente. Nadie acerca ni al cincuenta por ciento... Pero no lo digo con esto con soberbia, sino lo digo con orgullo”, asegura.
-¿Preparás alguna sorpresa para el cierre del show?
-Es como gracioso, porque yo digo, soy la reina de las tormentas y el temporal me la tiró. Pero en realidad, nada, en el final hay algo que tiene que ver con las tormentas. Que está buenísimo, que es un efecto maravilloso y que me costó mucho conseguirlo. Es una lluvia impresionante de agua que escribe palabras. La gente se va a pegar un flashazo increíble en ese final.
-Dionisio a veces aparece en el final, ¿Está incursionando en el mundo del circo?
-No, este guacho está cada vez es peor, aparece cada vez menos, porque es re futbolero. En casa de herrero, cuchillo de palo. Le gusta mucho más el fútbol, cuando viene al circo al circo se queda atrás. Ahora me dice “no quiero salir con vos al final”.
-De todas formas, es parte fundamental de El Circo del Ánima...
-Él es solamente la imagen del show, porque yo quería que tengamos esa imagen familiar. creo que el único espectáculo que logra reunir a los abuelos, los padres y los hijos en la platea.
Flavio Mendoza.“A Dionisio le gusta mucho más el fútbol, cuando viene al circo al circo se queda atrás. Ahora me dice “no quiero salir con vos al final”.
-¿Llegó a aprender alguna acrobacia?
-Hace de todo porque lo mando hacia la acrobacia en mis propias escuelas, hacia la acrobacia, Un poco me hace acordar a mí, yo nací en un circo, y al tenerlo, es como que no le das la importancia que tiene.
-¿Cómo pasaste el Día del Padre?
-Me despertó con una cartita y con un desayuno. Fue un amor, él se levantó, aparte, no lo escuché. Debe haberse dormido sabiendo que al otro día era el Día del Padre. Yo lo vivo como todos los días.
-Dionisio cambió la vida...
-Desde que soy papá, hace siete años, es lo mejor que me pasó en mi vida. Ser papá, sentirlo, estar con él. Duermo todavía con él. Algunos “no hay que dormir más con el nene”. Pero bueno en algún momento se va a ir, así que no lo fuerzo.
Flavio Mendoza.“Duermo todavía con Dio. Algunos “no hay que dormir más con el nene”. Pero bueno en algún momento se va a ir, así que no lo fuerzo”.
-¿Te replanteaste la decisión de ser papá soltero en este tiempo?
-Creo quefue mejor elección. Si bien en algún momento me dio miedo, porque cuando estaba en el proceso, me agarró como esa cosa de la responsabilidad, del miedo... Pero lo volvería a elegir, volvería a ser papá. Ttendría diez hijos si pudiese.
-¿Estás con las gestiones para tener otro?
-No. Creo que es algo que si tiene que venir, va a venir. No lo quiero publicitar. Lo que tengo que publicitar es lo que hago. Me parece que a veces se ha tomado para estar más en el candelero. A mí no me gusta eso. Si bien sale en la publicidad del Circo, es porque realmente yo tengo esa cosa mía transmitían mis abuelos en el circo, pero no quiero explotar a mi hijo. Tengo algo encontrado.
-¿Cómo estás a nivel sentimental?
-La verdad es que la estoy pasando muy bien. Mi última pareja. Cuando tenés un hijo es muy difícil ponerte en pareja. Yo estuve en pareja estando con Dio muy chiquito, y Dio lo sufrió. Me di cuenta cuando él ya no estaba que lo sufrió mucho.
-¿Cuál sería la solución entonces?
-Mejor cada uno en su lugar. En este momento estoy solo pero tampoco estoy cerrado al amor. El tema es que la prioridad de hoy es Dio.
Flavio Mendoza.“En este momento estoy solo pero tampoco estoy cerrado al amor. El tema es que la prioridad de hoy es Dio”.
-¿Y la empresa?
-¡Y la empresa! Son varias empresas, porque no solamente hago circo, sino también teatro y ahora tengo varias propuestas muy grandes. Tengo que viajar de vuelta a China a trabajar allá, voy con un nuevo espectáculo y no paro. Ya volví a invertir en unas cosas muy impresionantes.
-De repente hablás como todo un productor y empresario.
-Me parece que nuestro país es un país que culturalmente es muy fuerte son pocos en el mundo como Argentina. El país me da esa posibilidad de seguir haciendo, seguir creando y seguir soñando en que pueda hacer cosas copadas
-¿Qué te impulsa a subirte al escenario? Porque bien podrías quedarte gerenciando tus negocios tras bambalinas...
-Creo que el público. Cuando me digan”señor, bájese" “basta de hacer papelones”, creo que ahí va a ser mi despedida. En muchos espectáculos que hago, por ejemplo, Halloween o Navidad, que también se hacen en el circo, no estoy en el escenario. Pero siempre la gente como que me quiere ver.
Flavio Mendoza.“Cuando me digan”señor, bájese” “basta de hacer papelones”, creo que ahí va a ser mi despedida".
-Te debés a tu público...
-Es lo que a mí me mantiene. Yo lo que siempre digo es como que le digo a mis primos a mis tíos es “decime si de verdad se me ve bien si no se me ve bien, no quiero hacerlo”. También en el espectáculo hago lo que puedo hacer. No me exijo hacer algo donde haga el papelón. También tengo ese criterio de que no me quiero ver mal, así que me cuido, ya no salgo tan desvestido. Después, no es que me tengo que bajar, sigo siendo director y de última puedo cambiar el rubro puedo hacer una comedia. Puedo hacer tantas cosas que eso no voy a dejar estar arriba del escenario.
-¿Cómo te mantenés con ese cuerpo escultural?
-Entreno todos los días de mi vida. Encima tengo muchas lesiones en el cuerpo, entonces tengo que entrenar todos los días y aparte comer bien. No hay recetas mágicas. Hay que ponerse. Voy caminando al gimnasio de un amigo que está a veinticinco cuadras de mi casa, me entreno una hora y veinticinco, y me vuelvo caminando. De lunes a viernes tipo nueve, diez de la mañana. Más los ensayos y lo que tiene que ver con el espectáculo, que también es otra parte de entrenamiento.
-¿Dionisio se entrena para jugar al fútbol?
-Hoy (martes) va a fútbol. Después hay un campeonato en septiembre, que tengo que ir todos los sábados muy temprano. Ya me compré hasta una heladerita y una sombrilla para sentarme. Pero lo disfruto.
-¿De qué juega?
-Es el siete ¿siete qué es? Delantero. Aparte, él es de Boca y por el Mundial de Clubes hizo un cartel, esperó y me contó que “empatamos con Sporting de Lisboa”. Y yo le dije, “¿qué quiere decirle?“. Y me explicó todo. Aparte, sabe todos los nombres de todo. Yo soy muy amigo de Celia, la mamá de Leo Messi, le mandé un mensaje de Leo para el cumpleaños. Fue impresionante. Hoy creo que el superhéroe de todos los nenes es Messi.
-¿Soñabas con este presente de papá y empresario cuando estabas en tu Nogoyá natal de chico?
-En mi adolescencia la estaba pasando muy mal en Nogoya, y me acosté en la intersección de unas calles y supliqué “por favor Dios, sacame de acá”, o que un platillo volador llegue y me saque. Estuve 10 minutos, me levanté y me fui. Pero digamos que decreté eso. Necesitaba lograr algo que me hiciera feliz. Pero no por el pueblo, no había nada de lo que a mí me conectara.
Flavio Mendoza.En mi adolescencia la estaba pasando muy mal en Nogoya, y me acosté en la intersección de unas calles y supliqué “por favor Dios, sacame de acá”. Estuve 10 minutos, me levanté y me fui. Pero decreté eso. Necesitaba lograr algo que me hiciera feliz.
-¿Reconocés tu historia en la de otros?
-Yo hago muchos casting, y viene mucha gente del interior y dicen, “lo que pasa es que yo no me puedo venir”. Pero yo les termino diciendo, “venite, tenés que sacrificarte, tenés que luchar por eso que querés, porque no es fácil lograr lo que querés”. Los espectáculos se producen acá, entonces cuando sos del interior cuesta mucho, pero hay que animarse.
-¿Cuál fue el punto de inflexión de tu carrera?
-Fue la tele. Yo empecé con Animales Sueltos, era como notero y hacía informes. Después hice Tinelli. Si bien ya trabajaba con Marcelo, trabajaba en la parte de atrás, siempre en traer cosas de afuera. Ese fue como el gran cambio y creo que la gente ahí como que me quiso como que te empieza como a conocer desde otra forma, entre quilombo y pelea.
-¿Cuál fue la receta de tu éxito?
-Tiene que ser una mezcla de todo, porque cuando solamente es quilombo y pelea la gente no ve lo que vos tenés como talento. Cuando hacés un poco de quilombo pero también hacés algo que te conmueve me parece que eso te da como una una exposición diferente. Fue a tele y el cariño de la gente. Stravaganza fue mi gran espectáculo no lo puedo negar. Eso que fue un gran cambio a nivel teatral.
Video y edición:
Fernando Halperín.