La noticia de que Halit Ergenç, el actor que interpretó a Onur en la exitosa novela Las mil y una noches, fue condenado por la justicia turca a un año, 10 meses y 15 días de prisión, generó un fuerte impacto en los medios de Turquía.
La sentencia se dio en el marco de una causa judicial que lleva más de una década, relacionada con su declaración como testigo en el contexto de las protestas del Parque Gezi en 2013.
Aunque aún no hizo declaraciones públicas completas, medios locales accedieron a la reacción de Ergenç en la audiencia final.
Ofuscado por el fallo, el actor cuestionó al tribunal: “Me interrogaron como testigo y no mentí. ¿Entonces mentí? Apelaremos la decisión”.
Con estas palabras, dejó en claro su intención de revertir la condena, que por ahora no implicaría su detención efectiva mientras no incurra en otro delito.
UN PROCESO POLÉMICO Y UNA RESPUESTA ENÉRGICA
La justicia turca determinó que Ergenç brindó falso testimonio respecto a su participación en las protestas que sacudieron Estambul hace más de 10 años.
En su descargo ante el juez, el actor manifestó:“La sinceridad es un concepto relativo; podemos posar con franqueza con muchas personas en distintos lugares de la industria, o puede que no estemos tan cerca como podríamos de personas con las que hemos filmado muchos episodios de un mismo proyecto”.

LA PUBLICACIÓN DE FOTOS Y EL ORIGEN DE LA CAUSA
El conflicto judicial se originó a raíz de la difusión de imágenes en redes sociales, en las que se implicaba a Ergenç como parte de una supuesta planificación organizada de las protestas.
Según el actor, esas publicaciones lo perjudicaron gravemente. “Desearía haber presentado una contrademanda en su momento. Estaban haciendo afirmaciones increíbles. Solicito mi absolución porque no hubo elementos jurídicos para probar un delito”, expresó ante el tribunal.
Aunque el fallo fue contundente, Ergenç no será encarcelado de inmediato, siempre y cuando no cometa otro delito durante el plazo de cumplimiento de la sentencia.
Mientras tanto, la defensa ya prepara la apelación, en una causa que sigue generando debate público y que involucra no solo a figuras del espectáculo, sino también a intereses políticos y judiciales.