Cuando se convirtió en una gran estrella, Reginald Kenneth Dwight, mejor conocido como Elton John, comenzó a ser uno de los favoritos de la realeza británica. Desde 1970, tuvo una estrecha relación con ellos y se le podía ver con la Princesa Margaret en eventos sociales y con el Príncipe Carlos en obras de caridad.
El cantante engalanó con su música algunos de los eventos más importantes de la familia real y allí conoció a Lady Di, quien más tarde se convertiría en su gran amiga y confidente. Específicamente en 1981, cuando cantó en el cumpleaños número veintiuno del Príncipe Andrew en el Castillo de Windsor. Diana ya estaba comprometida con el Príncipe Carlos, con solo 19 años, y le mandó una carta de agradecimiento al cantante, la cual fue el inicio de su amistad.
En los años posteriores, fueron juntos a eventos de caridad y Diana realizó varios actos de beneficencia a favor de Elton John AIDS Foundation.
Sin embargo, en los últimos años de vida de la princesa, la amistad se fue deteriorando poco a poco. El temperamento de ambos complicó los intentos de cada uno por reconciliarse y no fue posible hasta el funeral de Gianni Versace, en julio de 1997, tras apoyarse por la muerte del diseñador.
Un mes después, Diana falleció en un accidente automovilístico. El cantante recibió la fatal noticia por medio de un fax de un amigo en el que le expresaba sus condolencias.
Elton fue invitado a honrar a su amiga durante el funeral. Quiso componerle una canción especial pero no tuvo tiempo. Así que se reunió con su compañero letrista Bernie Taupin y el productor George Martin para reescribir su éxito Candle in the wind, el cual escribió para la fallecida Marilyn Monroe en 1973. En tan solo unas horas, la versión nueva de este tema se convirtió en uno de los sencillos más vendidos.