Comer frutas y verduras puede promover el bienestar emocional entre los adultos jóvenes sanos. Una investigación sugiere que un buen estado de ánimo puede conducir a una mayor preferencia por los alimentos saludables en los alimentos excesivos.
Cuando comes frutas, tu suministro de energía aumenta en poco tiempo. Este es uno de los principales beneficios de las frutas que podemos utilizar en nuestros apretados horarios.
Esta es la razón por la cual los atletas a menudo comen fruta durante y después del ejercicio, y por qué las dietas para las madres embarazadas casi siempre involucran frutas de algún tipo.
Las frutas como albaricoque, manzana, banana, melón, frutilla, pomelo y naranja son excelentes para proteger su corazón, ya que son ricas en flavonoides, carotenoides, fibra, potasio y magnesio.
Las frutas también contienen vitaminas como vitamina A, vitamina B6, vitamina C, vitamina E, vitamina K y ácido fólico, las cuales ayudan a regular los niveles de colesterol y previenen enfermedades cardíacas como derrames cerebrales, aterosclerosis y ataque cardíaco.
La diabetes tipo 2 es una condición que preocupa a la mayoría de las personas en todo el mundo. Si bien las frutas son saludables para todos, las que tienen un mayor contenido de carbohidratos no se recomiendan para diabéticos.
Las frutas como la manzana, palta, cereza, banana, naranja, ciruela, etc., tienen un índice glucémico (IG) bajo, menos de 55, y ayudan a controlar los niveles de azúcar en la sangre. Además, las frutas procesadas y enlatadas no son saludables ya que contienen edulcorantes artificiales, por lo que siempre coma frutas frescas para obtener los máximos beneficios.
En tanto, las frutas ricas en vitaminas son excelentes para la prevención y el tratamiento de muchos tipos de cáncer, como el cáncer de hígado y el cáncer de mama.
Cuando se consumen regularmente, las frutas tienen la capacidad de mostrar propiedades hepatoprotectoras que ayudan a expulsar el cáncer
Asimismo, las frutas ricas en potasio como la banana, manzana, melón, ciruela, pera, albaricoque y mango ayudan a reducir la hipertensión. Este mineral ha sido conectado a la regulación de la presión sanguínea debido a sus propiedades vasodilatadoras.
Por último, es bien sabido que las frutas son ricas en vitamina C, lo que ayuda a tratar los cálculos renales. En este sentido, las naranjas y los limones son excelentes para reducir las posibilidades de padecer cálculos renales.