Si algo tenía Diego Maradona era que no le resultaba indiferente a casi nadie, y eso explica el dolor que se expresa en todos los rincones del mundo tras su muerte a sus 60 años. Entre las millones de anécdotas personales del impacto que causó la noticia, Yanina Latorre contó en Stories su vehemente reacción.
“Me shockeó. Me avisó Dora, mi mamá. Estaba en el camarín porque recién había terminado Los Ángeles de la Mañana, fue más o menos cuando lo empezaron a decir en América, Guillermo Andino fue el primero, con Luis Ventura. Cuando salí corriendo al pasillo del canal no había nadie, la busqué a Mariana Fabbiani y no lo podíamos creer. Empecé a los gritos, le decía ‘¡Mariana! ¡Mariana!’, y ella lo buscó en el celular porque no sabíamos si era verdad… Qué loco todo”, afirmó Yanina.
"Cuando salí corriendo al pasillo del canal no había nadie, la busqué a Mariana Fabbiani y no lo podíamos creer. Empecé a los gritos, le decía ‘¡Mariana! ¡Mariana!’, y ella lo buscó en el celular porque no sabíamos si era verdad… Qué loco todo”.
Luego, relató que se pasó el día viendo todo lo que mostraban en los medios. “Pienso todo el tiempo en Claudia, Dalma y Gianinna. Que me disculpen todos los demás, pero son a quienes más conozco, quiero y respeto. Lo que se bancaron ellas tres no se lo bancó nadie. Debe ser muy difícil ser ellas. Sobre todo Claudia, conozco pocas mujeres tan valientes y tan fuertes. Ojalá ahora pueda ocuparse de todo. Pero la que les espera ahora, un quilombo… todo lleno de buitres”, continuó Yanina Latorre sollozando y enalteciendo a Claudia Villafañe, la madre las dos hijas mayores de Diego Maradona.
“No puedo creer en la soledad en la que terminó Diego”, reflexionó Yanina a pesar de decir que Maradona nunca le "cayó del todo bien". Es más, con cariño, Yanina Latorre recordó: "La última vez que hablé con Diego Maradona me llamó para putearme porque había defendido a Claudia. Me dijo 'yo te voy a decir quién es Claudia', y yo lo saqué cag..., pero con terror. ¡Me había llamado Maradona de una! Me llamó post LAM para putearme, pero bien. Porque para él las mujeres de los futbolistas eran como intocables".