Julián Weich fue internado por coronavirus el 14 de julio en el Instituto Argentino de Diagnóstico y Tratamiento (IADT) en medio de un escándalo policial. Es que sus vecinos pensaron que estaba incumpliendo con el aislamiento obligatorio, pero en realidad estaba yendo a internarse.
El conductor presentó una mejoría en su cuadro de salud y finalmente pudo salir de terapia intensiva. Actualmente, se encuentra en una sala común del IADT acompañado constantemente por los profesionales de la salud.
Para evitar especulaciones, su médico, Mario Fitz Maurice, contó cómo avanza la recuperación de su paciente. "Cuando lo vi, estaba cenando bien y hoy ya hicimos una pruebita, que es la máscara con reservorio, que la va a tener fundamentalmente durante el día de hoy casi seguro; hicimos una prueba con bigotera y también la está tolerando bien. Estamos desandando el camino, que hay que hacerlo en forma prudente... Cada paciente es distinto y tenemos que probar tolerancia; obviamente, si con la bigotera no satura bien y tiene que aumentar la frecuencia respiratoria, volveremos a la cámara con reservorio y punto. Hay un pasito que ya estamos desandando y que indica una buena evolución”, contó en diálogo con Otra vez juntos sobre el conductor que se encuentra en terapia intermedia.
Además, remarcó que Julián permanece positivo pese a estar internado: "Está muy bien, él dice que se siente bien, casi que no podés tomar como valor clínico cómo se siente porque él estuvo con parámetros malos sintiéndose bien y le pone muchísima voluntad”.
Y se despidió haciendo hincapié en que cada vez que le pregunta cómo está el conductor le responde con buena onda, dispuesto a poner lo mejor de sí mismo para recuperarse.
"Siempre que le preguntás dice: 'Bien, ¿qué voy a hacer? No me queda otra, tengo que ser positivo, tengo que pelear por esto, sé que salgo adelante'. Está con el ánimo por las nubes. En ningún momento se le cayó ni la buena onda, ni las ganas, ni el ánimo. No se dejó llevar por estar enfermo y por la terapia intensiva. Esto ayuda a la parte clínica, porque un 50 por ciento siempre lo pone el paciente, ninguno puede solo, acá se trabaja juntos y él está poniendo su parte a pleno. Hoy en vez de estabilidad, tenemos una mejoría”, cerró.
¡Mucha fuerza!