Falta menos de una semana para que una exitosa dupla de actores argentinos vuelva a la pantalla grande con otro desafío en clave de comedia. Me casé con un boludo llegará a los cines el jueves 17 de marzo con Valeria Bertuccelli (46) y Adrián Suar (47) como protagonistas, bajo la dirección de Juan Taratuto.
La historia se centra en Fabián (Suar), un actor súper famoso; y Florencia (Bertuccelli), una desconocida y poco experimentada actriz. Tras la alegría inicial del casamiento, ella se dará cuenta de que unió su vida con alguien con muy (¡pero muy!) pocas luces y ése será el desencadenante para que él comience sus planes para reconquistarla.
En diálogo con Ciudad.com, Valeria mostró todo su histrionismo y buen humor en un divertido mano a mano. Adelantó detalles de su personaje, el cine, por qué no quiere trabajar en televisión, su familia y hasta de una muy poco conocida historia de cuando vivió en Australia con su familia.
"No me gusta mucho la tele, tantas horas. Prefiero hacer cine, me gusta más cómo se trabaja, por los tiempos y todo y sigo ese rumbo. Puede pasar que aparezca algo en la tele que me encante pero por ahora tengo otra peli para hacer en agosto y veo que voy a seguir para ese lado. Yo te trabajo todo en plasma, me favorece la pantalla grande, ja, ja".
-El trailer de Me casé con un boludo es atractivo y promete risas. ¿Qué nos dirías vos para que nos den todavía más ganas de ir a verla?
-Es muy graciosa la peli, quizás está mal que yo lo diga. Es una comedia romántica y tengo la sospecha de que se van a reír mucho.
-Además, vuelve una gran dupla que ya vimos en Un novio para mi mujer.
-Sí. Una sola vez trabajé con Suar, por más que a la gente le da la impresión de que fue más. Nos llevamos muy bien, me divierto mucho con él.
-En la peli anterior hiciste de la Tana Ferro y una escena quedó inmortalizada para siempre ("No te lo puedo creer, al final somos vos, tu ex, tus amigas Gachi y Pachi yo y estos dos pelotudos, ¡todos de sagitario!") y la cosa es que ¡al final vos sos de sagitario!
-Ja, ja. Sí, soy de sagitario. Y te digo que me interesa el tema de los signos, aunque tampoco le doy mucha bolilla. Tengo unos signos favoritos...
-¿Cuáles?
-Piscis es mi favorito, me encanta la gente de piscis. Sé poquitas cosas de los que me gustan, mis dos hijos (Florián, de 21, y Vicente, de 9, ambos junto a Vicentico, su marido desde hace casi 22 años) son de piscis y me caen muy bien. No sé por qué me caen tan bien esos dos chiquitos... Ja, ja, ja.
-Uno de los dos ya no es tan chiquito. ¿Cómo es ser la mamá de un joven de 21 años?
-¡Está genial! Lo tuve a los 24, ahora es un muchacho pintón, es mucho más alto que yo. ¿Si soy celosa? No. Soy más hinchabolas de cuidarlos, pero no de celos. Los dejo salir y sufro, soy muy tana. Los dejo y sufro, los dejo y sufro, ja.
-Contanos de tu personaje en la peli. ¿Tiene cosas de vos? Porque Florencia también es actriz...
-Pero es una muy mala actriz, nada que ver conmigo, ja, ja, ja. Es alguien muy inseguro, con la autoestima muy baja. Tiene muchas cosas con las que me siento identificada y con otras no tanto.
-¿Es difícil actuar mal a propósito?
-Y bueno, me dirán "no es tan difícil, te sale re fácil, che", pero esto que intenté tenía su dificultad.
-La temática de la película es básicamente lo opuesto a lo que te pasa a vos en la vida, que estás en pareja hace 22 años con el mismo hombre...
-Claro, ellos se enamoran muy rápido, se casan muy rápido y cuando se van a vivir juntos es como que se conocen y ahí se complica todo.
"Soy de sagitario, como la Tana Ferro. Y te digo que me interesa el tema de los signos, aunque tampoco le doy mucha bolilla. Tengo unos signos favoritos... Me encanta la gente de piscis. Sé poquitas cosas de los signos que me gustan, mis dos hijos (Florián, de 21; y Vicente, de 9; ambos junto a Vicentico, su marido desde hace casi 22 años) son de piscis y me caen muy bien. No sé por qué me caen tan bien esos dos chiquitos... Ja, ja, ja".
-Viendo el trailer pudimos notar que utilizaste la frase "no me gusta que se diga que soy una bombacha floja", también te la habíamos escuchado cuando salió el rumor de que estabas enamorada de Ricardo Darín, y que por eso habías dejado Escenas de la vida conyugal, algo que ya desmentiste. ¿Fue una incorporación tuya al guión?
-Ja, ja. Todavía no me lo habían preguntado. ¡Olvidemos ese rumor ya mismo! Ja, ja. Esa frase se la escuché a una amiga mía que es actriz, y no voy a decir quién es. "Se dice que soy una bombacha floja", y dije "es lo mejor del mundo" y la metí en la peli y la llevé a aquel momento de mi vida. Es una imagen perfecta.
-¿Cómo te llegó la propuesta para hacer la película? Se te nota muy metida en todos los detalles.
-Adrián me llamó para otro trabajo y yo le dije "eso está bueno, pero tengo otra idea" y le conté esta idea y me dijo "está buenísima, pero para hacer una peli". Así que llamamos a Pablo Solarz, que terminó siendo el guionista, y con esa semilla escribió todo y está buenísimo. Además, con Adrián participamos bastante y cuando estuvo listo, pensamos en quién la podía dirigir y llamamos a Juan Taratuto. Mirá, yo soy la piedra fundamental te diría, sin mí esto no sería igual, ja, ja, ja.
-Hablando de vos: ¿qué hacés para cuidarte físicamente?
-Soy una mujer grande pero bien mantenida, ja. Ahora hace un montón que no hago yoga ni nada y está muy mal, pero me anoté anteayer en el gimnasio. ¡Ya estoy hablando de cualquier cosa, no lo puedo creer!
-Bueno, entonces aprovechamos: ¿qué queda de aquella niña nacida en San Nicolás?
-La tengo muy incorporada y seguramente tengo mucho. Lo que más me hace actuar y divertirme tiene que ver con eso.
"De los 2 a los 4 años viví en Wollongong, cerca de Sidney. Me acuerdo muy poco. Adrián nació en Queens y yo viví en Australia, ¡no sé qué hacemos que no estamos en Hollywood! Ja, ja. Lo gracioso en Australia es que mi nombre era "Molly" porque yo me llamo Mónica Valeria. Cuando volví a la Argentina me cuentan que empezaba a hablar en español y como que me incomodaba y seguía en inglés. ¡Y ahora no hablo una palabra de inglés!".
-¿Y con tu paso por Australia, donde viviste siendo muy pequeña? ¿Qué recordás de esa experiencia?
-Viví en Wollongong, cerca de Sidney. Me acuerdo muy poco porque viví de los 2 a los 4 años. Adrián nació en Queens y yo viví en Australia, ¡no sé qué hacemos que no estamos en Hollywood! Ja, ja. Lo gracioso en Australia es que mi nombre era "Molly" porque yo me llamo Mónica Valeria, si me googleás dice que soy Sonia Valeria, pero no. La cuestión es que me pusieron Mónica pero jamás nadie me dijo Mónica, ni mis padres, o sea no sé para qué me lo pusieron. El tema es que cuando me anotaron en el jardín en Australia me empezaron a decir "Molly" y así fue por dos años. Encima, si te ponés a pensar, fue como me empezaron a llamar en mi vida. Cuando llegué acá tenía un acento y me cuentan que empezaba a hablar en español y como que me incomodaba y seguía en inglés. ¡Y ahora no hablo una palabra de inglés!
-Para cerrar, queremos saber por qué no te copa tanto trabajar en televisión y lo último que hiciste fue Vientos de agua, en 2006.
-No me gusta mucho la tele, tantas horas... Prefiero hacer cine, me gusta más cómo se trabaja, por los tiempos y todo, y sigo ese rumbo. Puede pasar que aparezca algo en la tele que me encante, pero por ahora tengo otra peli para hacer en agosto y veo que voy a seguir para ese lado. Yo te trabajo todo en plasma, me favorece la pantalla grande, ja, ja.