Para poder realizar una propuesta de casamiento a lo grande, Roberto García Moritán contó con la ayuda de cuatro de las mejores amigas de Pampita. Así Puli Demaría y Estefanía Novillo, sin Julieta Novarro y Oriana Montanelli que también fueron parte de la organización, confesaron cómo fue planear el especial momento para su amiga.
Las dos contaron que el empresario las llamó doce días antes del viaje y las sorprendió al decirles que quería pedirle matrimonio a la modelo. Como el viaje a Punta Cana ya estaba planeado, ambas pensaron en hacerlo todo allí, pero antes hubo todo tipo de ideas que quedaron en el camino. “Hay un video de una propuesta de casamiento muy genial a la que una chica le tira un trago a la novia y es un mob donde todos bailan en la calle, íbamos a pedirles a unos bailarines que participaran y entrábamos bailando”, contó Puli.
"Decidimos que iba a ser en la playa y ahí empezó el debate de si se subía a un barco y el clima era un tema. Si ponían fuegos artificiales o si el ‘casate conmigo’ se encendía"
También barajaron la posibilidad de un pedido de mano en Puerto Madero y con un helicóptero: “Nos pareció mucho, ella quería que bailáramos y terminamos llamando a Águeda, que es un amor trabaja en el hotel y no fue canje sino que le pedimos ayuda”, aseguró Estefanía. “Se nos ocurrió Punta Cana porque nos empezamos a asustar para organizar algo acá y que no se entere nadie. Había que confiar en el proveedor del avión, los bailarines...”, contó, sobre la posibilidades de que todo se descubra antes.
“Después decidimos que iba a ser en la playa y ahí empezó el debate de si se subía a un barco y el clima era un tema. Si ponían fuegos artificiales o si el ‘casate conmigo’ se encendía”, siguieron relatando, mientras Pampita era pura risa.