El desafío que tenían que vencer los habitantes de era simple: mantener apretados dos pulsadores que accionaban una sirena por 48 horas ininterrumpidas. Como a esta altura ya es una tradición, los "hermanitos" volvieron a perder la prueba, pero esta vez decidieron hacer una huelga en el reality.
"Un aviso Gran Hermano. Sin en una hora no nos traen una prueba nueva o nos aprueban esta lo vamos a degollar a Matías", gritó Francisco muerto de risa, mientras deslizaba un palo de amasar sobre el cuello del misionero.
Los chicos hicieron sonar cacerolas y todo tipo de elementos de cocina por toda la casa en señal de protesta. "Nos mandaron una prueba que desde el principio estaba perdida. No es justo", manifestó , divertido frente a una cámara, con la cara tapada, como si de un piquetero se tratara.
Luego de recorrer cada rincón de la vivienda televisada, muerto de risa por la ocurrencia Francisco fue por más: "Un aviso Gran Hermano. Sin en una hora no nos traen una prueba nueva o nos aprueban esta lo vamos a degollar a Matías", gritó muerto de risa, mientras deslizaba un palo de amasar sobre el cuello del misionero.
¡Mirá el "piquete" que armaron los chicos de Gran Hermano 2015!