El relato de Daniela Cortés sobre el embarazo de Sebastián Villa que habría perdido en un episodio de violencia de género desencajó a Alejandro Fantino. Defendida por Fernando Burlando, la expareja del crack de Boca relató la aterradora historia de la paliza que recibió de su pareja: “¿Qué pasó con el embarazo, la situación del aborto? Lo perdí”.
Con pasmosa claridad, Daniela continuó: “Nosotros ya sabíamos que estaba embarazada. Me había hecho varias pruebas de orina, nos las realizábamos juntos. Es más, en Boca se dieron cuenta de que estaba embarazada porque él se lo contó feliz a la mayoría de sus amigos”.
Conmovida, la colombiana describió el brutal ataque del que fue víctima: “Nos íbamos a poner a hacer el trámite en la Anses, las ecografías y todo cuando tuvimos una discusión. Él no estaba de acuerdo con algo de lo que dije, yo estaba casi de dos meses, pero a él no le importó. Fue horrible, me dio patadas en el estómago, puñetazos, me empujaba. Me encerré en el baño y cuando me vi estaba sangrando. Llamé a mi mejor amiga y le dije que estaba muy mal, que había perdido el bebé. Yo ya sabía lo que me iba a decir el médico”.
“Yo le decía ‘ojo con el bebé’ y él me decía ‘no me importa’. A él no le importaba, no caía en la cuenta de nada. Me pegaba patadas en el estómago”.
Cuando Alejandro Fantino le preguntó cómo fue el momento en que perdió el embarazo, la graduada en ingeniería financiera y técnica en administración de empresas explicó: “Me pegó y de tantos golpes me tiró al piso y me pateaba. Yo trataba de esquivarlo pero la fuerza de un hombre nunca se va a comparar a la de una mujer, por más que una quiera empujarlo y salir corriendo. Él no me decía nada, se encarnizaba pegándome”.
“Yo le decía ‘ojo con el bebé’ y él me decía ‘no me importa’. A él no le importaba, no caía en la cuenta de nada. Me pegaba patadas en el estómago”, cerró Daniela Cortés sobre la violencia de género que ejerció sobre ella Sebastián Villa.
En una nota anterior con Crónica TV, la expareja del jugador de Boca había contado cómo terminó la dramática sitación: "Al otro día no aguantaba más el dolor y me desperté con un cólico, fui a la guardia inmediatamente. Allí, los médicos me realizaron una ecografía y me dijeron que ya no había feto, que había perdido el embarazo por los golpes que me había dado".