El conflicto entre Ángel de Brito y Matilda Blanco nació cuando a ella no le gustó nada el puntaje que le puso el jurado del Bailando. Una cosa llevó a la otra y él terminó definiéndola como "una momia sin autocrítica".
Sin embargo, la mala onda quedó en el pasado. Cuando Yanina Latorre le pidió a la producción de LAM unos días para irse de vacaciones con su familia, Matilda fue convocada para ocupar su lugar. La asesora de imagen aceptó y, con un look súper canchero, debutó en el programa.
"Qué lindo tenerte acá. Me encanta", expresó Ángel mientras le daba la mano. Mientas tanto, Lourdes Sánchez, que estaba sentada al lado de ella, reaccionó sin filtro y recordó la vieja pelea entre ambos.
"Me da gracia que vuelva Matilda, después de todo el bla, bla, bla que se mandó. Me encanta...".
"Me da gracia que vuelva Matilda, después de todo el bla, bla, bla que se mandó. Me encanta...", lanzó, picante. "Ya nos reconciliamos", le aclaró la nueva "angelita".
Pícara, Matilda contó que, antes de sentarse en la silla de LAM, tuvo que "trabajar el ego". "Fui a terapia una semana seguida. Lo pisé", remarcó.
"El ego se lastima rápido", añadió Ángel. Y aclaró que hay que trabajarlo siempre, más quienes forman parte del medio.
¿Reinará la paz?