A principios de noviembre Diego Maradona había pasado por el quirófano para que lo operen de un hematoma subdural, y tres semanas más tarde moriría a raíz de causas que investiga la Justicia.
En ese marco se produjo una reunión reunión en la que estaban Dalma, Gianinna y Jana Maradona, Leopoldo Luque, Víctor Stinfale, Maximiliano Pomargo, Agustina Cosachov y Verónica Ojeda en representación de Dieguito Fernando Maradona, para decidir qué se hacía con Diego después de la cirugía. Y en Los Ángeles de la Mañana pusieron al aire el audio del sonido ambiente que grabó uno de los allí presentes.
Ahí Dalma apuntó fuerte contra Matías Morla por no haberse presenado: “Me da mucha pena que que no haya venido Matías, que es el apoderado de mi papá en un montón de cosas. Me parece una pena que no haya venido porque él tiene que estar al tanto de todo lo que hablamos hoy. Yo todavía no entiendo por qué Matías no vino porque debería saber esto que está pasando. Supongo que en algún momento va a ir a ver a mi papá y tiene que saber cómo es esta idea que tenemos todos”.
“Matías Morla es el apoderado de mi papá, tiene su firma. Debería estar sentado acá”.
Entonces, Stinfale, socio de Morla en el estudio jurídico se excusó: “Yo intenté que Matías esté, pero se ve que él tuvo…”. Picante, Dalma chicaneó: “¿Tuvo miedo?”.
Aunque Stinfale defendió al letrado: “No. Miedo no porque no lo considero cobarde. Pasa que hay que ver cómo le funciona la cabeza. En su momento me dijo que le había explotado la cabeza. Creo que la persona para conatrle absolutamente todo, sos vos, Maxi (Pomargo). (…) Yo vine acá porque tengo una relación con Diego. Punto”. De todas formas, Dalma sentenció indignada: “Él es el apoderado de mi papá, tiene su firma. Debería estar sentado acá”.
Leopoldo Luque: “La chance de que esto (de la internación domiciliaria) funcione es baja, honestamente. Pero al mismo tiempo creo que es la única chance”.
En otro momento se coincidió que en la internación domiciliaria sería necesario “un enfermero las 24 horas”, y en ese punto Luque, el médico a cargo del tratamiento, advirtió: “La chance de que esto funcione es baja, honestamente. Pero al mismo tiempo creo que es la única chance”.
Al final, se debatió sobre cómo manejar el drama del alcoholismo de Diego Maradona para evitar “el desgaste de los vínculos”. Entonces, Jana Maradona cuestionó a Luque por su enfoque racional de la adicción de su padre: “Si vos le explicás que no tome alcohol porque está tomando medicación es como si nada. Yo se lo expliqué más de una vez”.