Si bien este tipo de engaños no es nuevo, quedó comprobado que durante la pandemia aumentaron los ciberdelitos. Y a la gran cantidad de personas que caen en la mira de los estafadores se le sumó Ana Rosenfeld, que se apuró en exponer en sus redes el "ofrecimiento" que recibió por privado.
“Hola, bombón. ¿Te interesan 10 mil dólares por fotos tuyas desnuda? Soy 100% confidencial, pago todo en efectivo al contado, hacemos envío por Mercado Pago o transferencia bancaria. Si te interesa, avisame”, decía el DM que la abogada recibió en su cuenta de Instagram de parte de un usuario desconocido, que no la seguía.
Pero esta persona no sabía con quién se había metido. “Haré la denuncia correspondiente para que un fiscal encuentre a este perverso. Si alguno de ustedes recibió este mensaje u otro similar, llámenme. ¡Los voy a sumar a mi denuncia! A esta gente hay que desenmascarar”, expresó la letrada en su posteo.
Sobre esta cuestión se refirió más tarde Rosenfeld en diálogo con Teleshow. “Estamos hablando de un tema muy delicado, porque la red que puede haber detrás de todo esto, si no lo exponés públicamente, puede seguir. En las redes sociales hay muchos chicos que pueden llegar a caer ante estos pervertidos”, dijo.
En este sentido, Ana señaló cómo operan este tipo de estafas en las redes: “Más allá de los seguidores que uno tiene, yo tengo 420 mil, tengo más de dos millones y medio de interacciones semanales. Eso quiere decir que te espía gente que no te sigue, por lo tanto los mensajes no te aparecen de seguidores habituales, que podés detectar fácilmente”.
"La red que puede haber detrás de todo esto, si no lo exponés públicamente, puede seguir, y hay muchos chicos que pueden llegar a caer ante estos pervertidos”.
Como imaginaba, ella no había sido la única en recibir propuestas de este tipo. “Recibí miles de mensajes públicos y como 200 en privado: a muchas mujeres famosas y a otras que no lo son les pasó lo mismo. Empiezan con 'sacate la remera, mostrame el corpiño, mostrame algo más', y así van levantando la apuesta. Obviamente esto después pasa a ser parte de una red de pornografía infantil, de pedofilia; no tiene límites”, informó.
“Recibí miles de mensajes públicos y como 200 en privado: de muchas mujeres famosas, y de otras que no lo son".
Ana aseguró que esta persona sabía quién era ella al momento de mandarle el mensaje y pudo comprobar que no era un mensaje automático porque el usuario siguió mirando sus fotos de Instagram.
“Por eso hice la denuncia donde corresponde: en la Fiscalía Especializada en Ciberdelincuencia. Además, adjunté otras denuncias que me fueron llegando, para ir a fondo con este tema. La causa quedó a cargo de la fiscal Daniela Dupuy”, cerró, dispuesta a llegar hasta las últimas consecuencias.