Con algunas frases polémicas, Marley soprendió este sábado en la tapa del diario Clarín y del suplemento
Y es que el conductor de La Voz Argentina habló no sólo de su exitoso programa de canto de Telefe, sino también marcó diferencias con Soñando por Cantar y con Mariano Iúdica, su conductor.
"Cada uno de los programas tiene su estilo, y los formatos son bien distintos. Quizá, en Soñando los agarró por sorpresa la situación, y no saben hasta cuándo tienen que estirar", asegura Marley.
"Quizá, en Soñando los agarró por sorpresa la situación, y no saben hasta cuándo tienen que estirar".
Además, respecto de su colega, suma: "A Iúdica le tengo todo el aprecio, porque lo conozco. El vino mucho a El muro infernal, y estaba siempre muy agradecido por la oportunidad que le dimos. Le dábamos mucha pantalla en ese momento, cuando no estaba en ningún canal. Venía de invitado casi cada dos semanas. Es copado. Se merece lo que le pasa, porque es buen conductor y buena persona. A mí me divierte más en su función de La Cocina del Show que en un tono tan alto y de tanta emoción".
Marley también agregó: "No vamos por el golpe bajo. La emoción puede surgir, pero no está pensado desde ahí. No lloramos todos porque a alguien le falta el trabajo o le falta una pierna. Tampoco yo haría tal cosa, porque poner el dedo en la llaga no es mi estilo".
"Nunca hice un fracaso. Alguna vez tendrá que suceder que no funcione. No puedo embocar siempre".
En otro orden de cosas, el Alejandro Wiebe habló de quién le parece que es el mejor conductor del mundo: "Conan O’Brien. De la Argentina, Marcelo (Tinelli). Lo ves cómo resuelve situaciones y cómo maneja climas, y no hay otro. Es la única persona que me asombra en ese sentido. Eso me da una pequeña envidia. Y la energía que tiene para reinventar el programa cada año...".
Para el final quedó una perlita imperdible: "Nunca hice un fracaso (Se ríe). Ahora que lo pienso, eso seguro va para el título. Si medimos en cuestión de rating, son todos programas que hacen 20 puntos o más. En la tele eso es importante, porque para que un programa sea rentable tiene que haber anunciantes. Hasta ahora tuve la suerte de caer siempre en buenos formatos, de que creáramos formatos de calidad o de que me ofrecieran buenos formatos extranjeros. Hay algo de mi olfato y también algo de suerte. Yo tampoco me quedo sentado. Siempre estoy pensando en el siguiente programa. Y no me gusta repetirme ni cansar a la gente. Alguna vez tendrá que suceder que no funcione. No puedo embocar siempre".
Inesperado, ¿no?