Los regalos no se regalan, pero... A más de uno se le habrá pasado por la cabeza utilizar aquel presente que alguna vez recibió (y no gustó) para obsequiárselo a otra persona. O también hasta habrá visto con buenos ojos la posibilidad de venderlo.
Este es el caso de Alejandro Fantino. El conductor contó, en Animales Sueltos, una divertida anécdota de unas botas que le regaló Ricardo Fort y que se le cruzó por la cabeza venderlas.
“Yo en un momento dado recibo una oferta de 1.600 dólares por esas botas. Fue un flaco del club que coleccionaba cosas de los medios. Él me dice `¿cuánto valen?´ y le digo `2 mil dólares´. Finalmente, me ofrece 1.500 dólares. En ese momento, levanto el teléfono de un amigo, y le pregunto cuánto valía el pack de gomas para el auto. Entonces digo: `cambio las gomas del auto y con tuercas de seguridad´”, contó entre risas el conductor.
¿Cómo terminó esta historia? Finalmente, Fantino conluyó: “Y no lo hice porque Ricardo me regaló las botas de corazón. No las vendí, las tengo, las banqué".
Para Alejandro Fantino, los regalos no se regalan… y tampoco se venden.
¡Mirá el divertido video!