Keith Richards se confiesa. Con 66 años y una vida de rockero que se las trae, el guitarrista de los Rolling Stones relatará su vida en una biografía que será publicada el 26 de octubre próximo.
En el auge de la banda, Richards fue protagonista de su propio abuso de drogas como la cocaína o la heroína, que ya lo habían marcado.
Además, el músico relata momentos cruciales y difíciles en su vida como la muerte de su hijo cuando tenía tres meses de vida. "Siempre fui muy meticuloso con respecto a la cantidad que me metía", explicó Richards haciendo referencia a la heroína, y continuó: "Nunca añadí un poquito más para hacer más grande el efecto".
El Stone asegura que, tras diez años de consumir, dejó la heroína en 1979. "Estaba convencido de que mi cuerpo era mi templo. Podía hacer lo que me diera la gana con él, nadie podía decirme que sí o que no", recordó en sus memorias, publicadas en un anticipo, justamente en la revista Rolling Stone, agregó Keith Richards.