El clima dentro del seleccionado alemán de fútbol está revuelto. Quizá por los malos resultados deportivos o la necesidad de tapar problemas mayores es que ahora salen a la luz.
Lo notable es que el propio representante de , Michael Becker, aseguró a '' que en la selección hay un combo gay. Y para no dejar dudas sobre el tenor de sus declaraciones aclaró que existe una asociación o un contubernio de futbolistas homosexuales.
Pero no se quedó sólo en supuestas acusaciones, sino que prometió que luego del partido de despedida de Bernd Schneider en el estadio del Bayer Leverkusen quedará todo expuesto. Irónicamente se trata del mismo equipo donde actúa Ballack.
Es más, hay versiones de que Becker deslizó que entre los deportista que disputaron el mundial había un jugador “medio gay”. Obviamente los nombres de los supuestos homosexuales no trascendieron.
Aunque no jugó por lesión, ya durante Sudáfrica 2010 se rumoreaba que e incluso el DT Joachim Loew o el mánager de Alemania, Oliver Bierhoff, estaban enemistados con el propio Ballack desde 2009. En la Confederación están en furiosos y ya exigieron a Michael Becker que salga a aclarar qué pretendía develar con estas declaraciones.
Si todo este patético escándalo fue pergeñado por una disputa comercial, es decir, por dinero sería muy triste. De todos modos, por más verdades que revele Becker, queda en evidencia su homofobia que recuerdan los peores momentos de la historia alemana. Porque, ¿qué habría de malo en que algunos futbolistas alemanes sean homosexuales?