Y un día Carmen Electra habló. La ex de Kobre Bryant se encargó de decirle al mundo que estaba arrepentida por los implantes mamarios que se había hecho. En criollo, se cansó de sus super tetas.
Pero (siempre hay un pero), la actriz se acostumbró al cambio: "Está bien no tener que usar un push up, pero podía haberme quedado con lo que tenía", dijo la diosa. "Me operé hace diez años y el aumento fue tal que me costó un poco acostumbrarme al resultado", agregó.
Aparte de los pechos, otros de los "plus" que tiene Electra son sus pestañas y sus extensiones de pelo. "Me encanta usar pestañas postizas en el escenario para lograr un look dramático, pero durante el día me gusta llevar la máscara de Giorgio Armani Eyes to kill en color negro", explicó.
Lo dicho, Carmen Electra está arrepentida de sus pechos. ¿Ustedes?