La Joaqui y Joaquina, dos personalidades distintas, dos historias diferentes que se tocan todo el tiempo. La artista reveló cada detalle de su vida.
Radio Boing 97.3 publicó un reel con varios fragmentos de entrevistas brindadas por la cantante, donde cuenta los momentos más duros y cómo salió de cada uno de ellos.
“Mi mamá se iba a trabajar y veces no supe qué hacer con tanta libertad. A los 12 fue la primera vez que consumí cocaína. Un jueves a la noche, un chico de 12 años está en su casa y yo, tal vez… Mi mamá, muy laburadora, laburaba hasta las dos de la mañana, entonces yo podía hacer con mi vida lo que quería”, empieza.
A lo que agrega: “Yo tenía que lavarme el uniforme sola y todo sola para ayudarla. Y tal vez mis compañeros no lo entendían. Me decían: ‘Ay, ahí viene la sucia’. Imaginate a los ocho años, cómo te lavás la remera del colegio”.
Luego profundizó: “Me vinculaba y me movía en lugares que eran peligrosos para mí. Creo que ser mamá fue lo que me cambió. Traté de hacer todo lo que siento que me hubiera gustado que hicieran conmigo y no se pudo”.
CÓMO CAZZU AYUDÓ A LA JOAQUI
La autora de San Turrona relató: “Estaba en una situación de violencia y, sinceramente, me preocupaba más mi abuelita que fue como mi mamá. En ese momento estaba con cáncer. Entonces me planteé que si le contaba lo que me estaba pasando se moría”.
Enseguida detalló: “No tenía celular, no tenía redes, me había quedado sin redes sociales, había perdido mi carrera, tenía otro bebé. No tenía casa, no tenía trabajo, no tenía plata, no tenía ingresos. Flaca, triste, mal de salud. Me sacaron un ovario ese año”.
Para concluir, la Joaqui expresó: “El único teléfono que me sabía era el de Cazzu, así que fui a un almacén, la llamé y le dije: ‘Tengo miedo de que me pase algo o que me muera y que mis hijas, no sé…’. Agarré una bebé acá, la otra acá y me fui”.