Marcelo Tinelli decidió romper con la tradición. Esta vez, el conductor argentino dejó de lado los clásicos atardeceres de Punta del Este y eligió el ritmo vibrante de Miami para pasar sus vacaciones. Un cambio de aire que no solo renovó el paisaje, sino también la forma de vivir el descanso.
A su lado estuvieron sus cinco hijos —Micaela, Candelaria, Francisco, Juana y Lorenzo— y el incondicional Luciano “El Tirri”, su primo y compañero inseparable de aventuras. La gran ausente fue Milett Figueroa, su pareja, con quien había compartido hace poco más de un mes un viaje soñado por la Costa Amalfitana, en el marco del cumpleaños de la modelo peruana.
En esta oportunidad, sin su novia pero rodeado de su núcleo más íntimo, Marcelo Tinelli apostó por unas vacaciones simples y afectivas. Nada de producciones grandilocuentes ni escenarios armados: las redes sociales se llenaron de imágenes espontáneas, auténticas, que mostraron momentos reales de conexión y disfrute familiar.
LAS POSTALES DEL VERANO DE TINELLI EN MIAMI
Desde almuerzos relajados hasta paseos junto al mar, las escenas compartidas por Tinelli reflejan una intimidad entrañable. En una caminata por la playa, la aparición de delfines generó sorpresa y emoción. En un restaurante, los abrazos entre padre e hijas convirtieron una comida cotidiana en una celebración.
En cada imagen se percibe lo mismo: cercanía, alegría, complicidad. Marcelo Tinelli elige el presente y lo hace con una fórmula que no falla: compartir tiempo con sus seres queridos. Lejos de la ostentación, su verano parece tener una única prioridad: estar juntos.
VACACIONES EN FAMILIA: EL VERDADERO REFUGIO DE TINELLI
En un año cargado de compromisos profesionales, el conductor de televisión hizo una pausa y priorizó lo esencial. No buscó escapar del ruido para encerrarse en el silencio, sino para reconectar con lo que le da sentido: sus hijos, sus afectos, esos vínculos que no necesitan escenografía ni filtros.