El fuerte accidente de bicicleta que sufrió Bono (54) hace siete semanas resultó más grave de lo que se suponía, y podría impedir que el músico vuelva a tocar la guitarra. La brusca caída que el líder de U2 padeció en el Central Park de Nueva York ameritó que le colocaran 18 tornillos en su cuerpo para reconstruir sus huesos.
"La recuperación ha sido más difícil de lo que pensaba... Mientras escribo esto, no está claro si podré volver a tocar la guitarra. Los muchachos de la banda me recordaron que ni ellos ni la civilización occidental dependen de esto".
"Me rompí la mano, el hombro, el codo y la cara, pero la verdadera lesión de este año fue en mi orgullo irlandés, ya que se descubrió que bajo mi chándal que llevaba pantalones cortos de ciclista de lycra color amarillo y negro. Sí, LYCRA. Esto no está muy de rock 'n ' roll", ironizó el artista en una extensa carta que publicó en el sitio web oficial del grupo.
En tono más serio, Bono luego admitió su triste realidad: "La recuperación ha sido más difícil de lo que pensaba... Mientras escribo esto, no está claro si podré volver a tocar la guitarra. Los muchachos de la banda me recordaron que ni ellos ni la civilización occidental están en función de esto". Y cerró con una sarcástica pregunta retórica: "¿Hay algún guitarrista que conozcan que tenga el codo de titanio, como lo tengo yo?".
Reflexivo, el músico asumió sus errores: "En el día de mi cumpleaños número 50 tuve una lesión porque era de caer en el boxeo recreativo y el ciclismo, que era en sí misma una compensación excesiva por excederme en el alcohol hasta el gran cumpleaños. Me prometí que iba a ser más consciente de mis límites, pero sólo cuatro años después volvió a ocurrirme una lesión masiva. No puedo culpar a nadie más que a mí mismo, principalmente porque me olvidé de todo en el impacto y no tengo ningún recuerdo de cómo terminé en el hospital Presbyteriano de Nueva York con mi húmero pegado a través de mi chaqueta de cuero. Muy punk rock, mientras sigan las lesiones".
"Desde hace unas semanas que no he sido capaz de manejarme físicamente, excepto por vía electrónica... He escrito letras para nuevas canciones".
Así las cosas, explicó con vehemencia el drama que le toca vivir: "Desde hace unas semanas que no he sido capaz de manejarme físicamente, excepto por vía electrónica... He escrito letras para nuevas canciones, pero también he tenido la oportunidad de mirar hacia atrás y revisar el año de una manera que nunca había tenido tiempo para hacerlo antes... Edge dice que me veo a mi cuerpo como un inconveniente. El problema, como yo lo veo, es que creo que mi cabeza es más dura que cualquier otra superficie".
Para cerrar, Bono concluyó: "Las consecuencias de este extraño accidente son tan significativos, que tendré que concentrarme mucho para estar listo para la gira de U2 en términos de estado físico... Como resultado, he cancelado cada aparición pública y decidí que esta carta sea toda la comunicación que dé para toda la primera mitad de 2015, más allá de murmurar y cantar para mí, por supuesto".