Tiene un gran sentido del humor y esa característica, sumado a su autenticidad, le abrieron camino en el medio televisivo. De temporada en Carlos Paz, Pedro Alfonso compartió una cena con sus compañeros de la obra Mansión imposible, en la que sacó a relucir al chiquilín que lleva dentro.
"¡Con @pedroalfonso se va la segunda pirámide imposible! ¡Hasta el obelisco no para! ¡Un chiquilín!", comentó Iliana Calabró, en una de las imágenes.
En la mitad de la comida, el actor comenzó a recolectar diversos objetos que había en la mesa. Dos copas, una botella de cerveza, una panera, un salero, una hielera, un plato y lo que hubiera a mano. El resto de los comensales lo miraban incrédulo cuando Peter comenzó a apilar de forma increíble cada uno de los ítems, en pleno despliegue de su “equilibrismo gastronómico”.
“¡Con @pedroalfonso se va la segunda pirámide imposible! ¡Hasta el obelisco no para! ¡Un chiquilín!”, escribió Iliana Calabró, en una de las fotos que compartió en su cuenta oficial de Twitter. “Y… ¡no hay dos sin tres!”, comentó en otra de las imágenes.
¿Cuántos platos y copas le habrá roto a Paula Chaves?