Solamente vos tiene todo lo que la audiencia de una comedia romántica quiere ver. Desde el comienzo de la tira, el conflicto estuvo bien demarcado: el amor entre los dos protagonistas (Adrián Suar y Natalia Oreiro) crecía sustancialmente, al mismo tiempo de que se achicaban las posibilidades de que sea posible.
Con el tiempo y un balcón de por medio apto para crear los enredos más desopilantes, el vínculo fue virando de la amistad más cómplice hacia la atracción más tierna. La pasión, entonces, fue inevitable.
Finalmente, en Solamente vos, se emitió una de las escenas más esperadas después de varios idas y vueltas, que hasta incluyeron el casamiento fallido de Aurora (Oreiro) con Félix (Juan Minujín). En una casa antigua del Tigre, ella y Juan (Suar) dejaron de lado las dudas, los arrepentimientos y el pasado complicado, se declararon oficialmente novios y pasaron su primera noche juntos.
En el capítulo abundaron los “te amo”, las promesas eternas, los besos y el romanticismo del encuentro al lado de la chimenea, mientras varios flashbacks recordaban todo lo que transitaron para lograrlo.
Habrá que ver cómo sigue la historia con el conflicto central resuelto. Nada está dicho.