Para muchos va a ser la explicación perfecta para entender el porqué de la derrota de Argentina el último domingo ante Alemania en el Mundial Brasil 2014: el papa Francisco optó por no ver la final de la Copa del Mundo para así resguardar su compromiso de mantener la "neutralidad" deportiva.
"El Papa dijo que no lo iba a ver, que lo iba a seguir según lo que le íbamos informando nosotros, paso a paso", aseguró en una entrevista con Radio Del Plata, Guillermo Karcher, secretario de Protocolo y Ceremoniero del pontífice. Y agregó: "No siguió casi ningún partido. Se propuso de entrada la neutralidad y ahí está”. Aunque sabía de todo lo que pasaba ya que “chicaneó” a un Arzobispo brasileño por el gol en contra que realizó Marcelo en el partido inaugural.
"Esta mañana lo saludé y le dije: 'Comencemos el día con una sonrisa, a pesar de la derrota'", explicó el vocero. Además se refirió a lo que se venía diciendo sobre las bromas de "la final de los dos papas" (por Francisco -argentino- vs. Benedicto XVI -alemán): "Los papas son personas que están por encima de estos asuntos: siempre dicen 'que gane el mejor'". Y aseguró que ellos no hablaron sobre lo que pasó el último domingo en el Maracaná: "No, no. El papa emérito está retirado. Nos pusimos contentos, hay que seguir apoyando a nuestra selección. Se mostraron grandes valores, sobre todo humanos, de este deporte".