La actitud de Federico Llamas, el surfer argentino que violó dos veces la cuarentena tras arribar en su camioneta desde Brasil, despertó la indignación de muchos famosos y televidentes.
Sin embargo, mientras hablaba de la situación judicial de su defendido, Roberto Herrera lanzó una queja al aire tras contar que Federico decidió cerrar todas sus redes sociales: "Hubo un error, no sé de qué medio ni en qué canal, que pusieron la foto con el teléfono de él (cuando mostraban el papel de la imputación del joven) y lo llamó todo el mundo, mucha gente puteándolo. Eso está mal, el teléfono de él no debería haber salido".
"Hoy a la mañana, Federico tenía 950 mensajes en su WhatsApp. ¿Si eran puteadas? La gran mayoría, sí… y no es agradable. No me dijo que haya recibido amenazas, pero sí muchos insultos”, agregó, en charla telefónica con Crónica TV.
"Le dije ‘no leas nada, correte de ese lugar y después vemos cómo seguimos’", fue la indicación que le dio el letrado a su cliente en medio de esta situación.