Facebook ha presentado los proyectos en los que actualmente está trabajando para llevar Internet a zonas del mundo donde no llega la fibra, con proyectos que incluyen cables submarinos, un robot instalador que se desplaza por las líneas de electricidad y un sistema inalámbrico que aprovecha el mobiliario urbano para ofrecer alta velocidad.
Más de 3.000 millones de personas carecen en la actualidad de acceso a Internet. La compañía, a través de Facebook Connectivity, ya ha llevado Internet fiable y de alta velocidad a más de 300 millones de personas, y planea llevarlo a otros mil millones de personas en la próxima década
Para ello, lleva varios años trabajando en distintos proyectos que incluyen el desarrollo de soluciones para llevar el Internet de alta velocidad a través del mar, la tierra y el aire, como han explicado en una rueda de prensa a la que ha asistido Europa Press.
Los cables submarinos son la columna vertebral del Internet global. Facebook Connectivity ha trabajado en la mejora de los cables de fibra, y ha presentado un sistema de cableado submarino transatlántico con 24 pares de fibra que conectará Europa y Estados Unidos.
Hasta hace poco, los cables submarinos transoceánicos incluían de dos a ocho pares de fibra. El nuevo sistema de cableado tiene una capacidad de medio petabit por segundo, es decir, medio millón de gigabits. Lo que significa que multiplica por 200 la capacidad de los cables transatlánticos de principios de siglo.
La compañía también ha explicado que en algunas secciones del proyecto 2Africa - que conectará África, Asia y Europa y ofrecerá conectividad a 3.000 millones de personas- se usará un nuevo sistema conductor de aluminio que sustituirá a los conductores tradicionales de cobre, lo que reducirá los costes de construcción de un cable tan extenso como este.
Por otra parte, la capacidad de los cables submarinos depende de la cantidad de energía que se puede entregar desde la orilla hasta una serie de repetidores, que dispuestos de forma consecutiva a lo largo del cable -cada 80km de distancia, aproximadamente-, que impulsan la señal en toda esta trayectoria.
En un cable submarino que una Europa y Estados Unidos a lo largo de 7.000 kilómetros se necesitaría un cable eléctrico muy largo. Para solucionar este problema, los ingenieros de la compañía han diseñado unas balizas flotantes que pueden distribuir la electricidad a los repetidores desde el océano.
Esta iniciativa se complementa con otras soluciones que combinan la acción de conversores de energía undimotriz (de las olas) y paneles solares, lo que permitirá pasar de medio a cinco petabits por segundo (diez veces más capacidad).
Y para evaluar la mejor disposición de los cables submarinos, la compañía ha desarrollado una herramienta de modelado predictivo, Atlantis, que ayuda a prever dónde debían construirse las rutas de cable submarino para garantizar la disponibilidad de red si se producen eventos inesperados, como terremotos.
Fuente EP.