El destape de Marina Calabró: "Por más que me aputone , sigo siendo la seria"

La bomba sexy de Infama, más explosiva que nunca. ¡Mirá las fotos exclusivas de Ciudad.com!

 

(Para ver las fotos en tamaño grande, hacé click sobre la imagen)

Fotos: Maxi Didari
Producción: Lola Levit
Make up y peinado: Cristian Rey - www.cristianreystyle.com.ar - Humbolt 1812, Palemo Hollywood.
Agradecimientos: Beleidades, Vírgenes de BA y Luciano Marra.
Locación: Moreno Hotel Buenos Aires - www.morenobuenosaires.com - Moreno 376, Buenos Aires, Argentina.

 

Una familia de artistas, una carrera universitaria en Ciencia Política y un destape súper sexy pasados los 35. Todo eso (y mucho más) forma parte del universo personal de Marina Calabró, quien, a sus impecables 38, se animó a una producción súper sexy para Ciudad.com. "Me sentí cómoda con las fotos, de modelo no tengo nada, soy pudorosa aunque no parezca", desliza la periodista luego de los flashes. Se la ve segura, y luce ese mix exacto entre madurez y sensualidad.

Además, Marina está en un gran momento profesional: no sólo es la panelista provocadora-provocativa de Infama, sino que también se luce como co-conductora (¡y hermana del alma!) de Ricardo Fort en Fort Night Show. Más relajada luego de las fotos, charló extensamente con este sitio sobre su vida personal, su familia, su nueva imagen y la posibilidad de subirse a las tablas: "Estoy más cerca del conchero que de un programa con Bonelli", resume entre risas, disparando el primer "título" de esta nota.

- ¿Cómo la pasaste en la producción de fotos para Ciudad.com?

- ¡Súper cómoda! El fotógrafo y la productora unos genios que me hicieron sentir re bien. Me sigue costando, pero lo que me cuesta no es la desnudez sino el arte de posar toda doblada y poner cara de estar pasándola bien (se ríe). Es divertido jugar un ratito, no tengo las condiciones, además... ¡a los 38 me animé! Lo bueno es que hoy en día hay muchísimas facilidades para retocar las fotos y eso.

- No te nos vengas a hacer la humilde, que tenés un cuerpazo y lo podemos ver todos los días en Infama y los sábados en Fort Night Show...

- (Ríe) A veces sufro por los vestidos tan ajustados, con la luz y eso, pero bueno, me relajo un poco y salimos.

- ¿Tenés identificado el momento en el que cambiaste tu imagen de periodista seria a panelista y conductora súper sensual?

- Creo que tiene que ver con Infama, donde entré en julio de 2010. La idea era que fuera un perfil como el que ya venía trayendo, con un saquito ajustado o un tailleur. Pero a Santiago (del Moro, conductor del ciclo) no le terminaba de convencer y me dijo "¿por qué no te animás a mostrar más piernas?". Lo dijo como una sugerencia para el personaje combativo de Infama, y la acepté. Entonces, pasé a ser la periodista combativa, aguerrida y a partir de esa búsqueda surgió este look. El de alguien que no quiere pasar desapercibido. Fuimos llegando hasta acá y no sabemos bien cómo, ja, ja. Ahora nos cuesta a veces salir.

- En el ciclo de Fort, sin embargo, bajaste un poquitos los decibeles

- Sí, es así. Para diferenciarme estoy de largo, por sugerencia de Ricardo. Ahí encuentro otro look, con más elegancia, estamos tratando de reemplazar el escote por otras cosas. Además, las "chicas Fort" están de corto y yo, que soy co-conductora, distinta. Creo que Ricardo tiene razón en eso y está bueno. En Infama ganó en visibilidad mi participación, incluso para la polémica, me parece provocador. Lo siento como un personaje, en la vida soy muy distinta.

- ¿Cómo sos en la vida?

- Más "domada", soy una convencida que la confrontación por la confrontación misma no conduce a nada, no es lo que elijo para mi vida. Las discusiones que sostengo en Infama terminan a las siete de la tarde.

- ¿Cómo te llevás con esta nueva imagen sexy? ¿Sentís que va en detrimento de tu palabra?

- La tele es imagen, Chiche (Gelblung) me decía siempre cuando trabajaba con él que yo le doy demasiada importancia a la palabra, la gente escucha el 50% y de ese porcentaje interpreta sólo el 10%. La tele es imagen y es cierto que tiene más peso a veces. El prejuicio existe, pero yo tengo cero prejuicio. Ni siquiera me quejo que no me llamen a un programa de política. El cambio de look se fue dando naturalmente, me fui dejando llevar, soy feliz en Infama, de todos los trabajos que he tenido, es el lugar en el que más feliz soy. También tengo que pensar que hay algo en mí que me llevó. Evidentemente soy esta también. Iliana (mi hermana) me dice siempre que hay una búsqueda en mí. Te repito: quizás estoy más cerca del conchero que de un programa enonómico o político con Marcelo Bonelli.

- ¿Te animarías a subirte a las tablas?

- Si tuviera alguna veta artística, sí. Estaría bueno subirme al escenario, soy cero prejuicio, quizás me anime, pero hoy por hoy no.

- ¿Se pone celoso de tu nueva imagen Martín (Virasoro, su pareja y padre de su hija Mía, de tres años)?

- Un poco le cuesta, no te voy a negar, después le gusta... se resigna. Era uno de los pocos que me apoyaba para hacer Playboy, él no es prejuicioso ni inseguro, me deja ser.

- ¿Y vos sos celosa (cabe recordar que Martín Virasoro fue jefe de coaches de Patinando por un sueño, en ShowMatch)?

- ¡Cero! Soy la persona menos celosa que conozco, no logro entender el sentido de los celos, quizás hasta provoquen lo contrario. Antes de revisarle el celular, me corto la mano, te degrada, ni loca.

- ¿Por qué creés que salieron algunos rumores de separación o crisis entre ustedes?

- Ni lo analizo el tema de la crisis, creo que tiene que ver con esto del “destape”, pero que digan lo que quieran. Eso es inevitable también.

- ¿Notás que se te acercan más los hombres, que tenés más propuestas?

- Mmmm, sí noto que se me acercan más los hombres, uno está más expuesto desde lo físico (N. de la r.: Marina aclara que no tiene cuenta social en Twitter, aunque un falso perfil suyo cosecha más de ¡14 mil seguidores!). Igual, será que soy grande o saben de mi situación, pero no voy por la calle y me hacen propuestas. Por suerte no, doy seria. Por más que me aputone, sigo siendo la seria.

- ¿Piensan en agrandar la familia con Martín?

- ¡No! No hay planes de agrandar la familia, Martín tiene un hijo de 21 años, además de Mía, que es hija única por parte de madre y lo seguirá siendo. Nunca digas nunca, pero ahora pienso que mi vocación de madre está sublimada con mi Carmencita Barbieri, como la llamo yo a la nena. Ella me discute y me dice: "No, yo soy Moria Casán", porque la ama a Moria, pero yo le dijo que es Carmencita porque es "Bravísima".

- ¡Ya tenés otra vedette en casa entonces!

-Ja, ja, sí. Va a ser vedette, Iliana está feliz con ella, le compra todas cosas con brillos, plumas, nunca una remera blanca lisa.

- Hablando de familia, ¿cómo nació tu relación con Ricardo Fort, a la que vos hasta llamás de "hermandad"?

- Nos conocimos en Infama, empecé a opinar sobre él antes de conocerlo. Un día vino al piso y me agradeció algo que dije a favor de él. Me sorprendió su gesto de caballero, él se estaba operando y conseguí su teléfono. Me dijo que le llamaba la atención que yo lo llame y me habló de la admiración que tiene por mi padre, que siempre le gustó mi familia. Cuando él me estaba diciendo "gracias por llamarme", o qué deferencia la mía,  yo lo pensaba al revés. Se fue creando un vínculo, ayer lo hablaba con mi psicóloga y le preguntaba de dónde vendrá eso, no sé si debería contarte esto, ja, ja... y analizándolo descubrimos que él siempre busca lo que sería la mirada de aprobación del padre. Y en mi caso, casualmente, es tener una vida sostenida en la mirada del padre. Tengo una conexión sorprendente con Ricardo, nos calamos mutuamente..

- ¿Cómo es el vínculo entre ustedes?

- Y sí, es como de hermandad, no sé de dónde, quizás viene que ambos somos "hijos de". Yo me río porque Ricardo siempre me dice: "Vos pensás que yo soy Johnny Tolengo (emblemático personaje de Juan Carlos Calabró) en versión real". Lo raro es que ni nos conocemos tanto ni sociabilizamos tanto, todavía lo estoy analizando... Estoy segura de que tiene que ver con mi papá. Lo que sí sé es que mi "problema" es que lo quiero, me cuesta verlo con objetividad, enojarme con él y conmigo es muy amoroso.

- Tan amoroso que hasta te regaló un Rolex...

- Sí. ¡Igual se lo terminé devolviendo! Establecimos un código, cuando él me trae el reloj, para mí fue una carga. Me dijo: "¿Cómo me lo vas a despreciar?", así que yo lo acepte, pero desde siempre supe que eso iba a ser una mochila. Luego de ese episodio, él se ofendió porque invitamos a (Joaquín) Starosta a Infama, pero yo no decido eso. Para él fue una traición. Cuando me dijo esa palabra automáticamente lo que hago es devolverle el reloj, fue un alivio. Creo que ese pequeño cortocircuito me sirvió, porque creo que ese reloj ensuciaba nuestra relación, la mercantilizaba.

- ¿Cómo viviste, entonces, la situación que enojó a tu papá (Juan Carlos Calabró) luego de su participación en Fort Night Show?

- Mi viejo salió del programa enfurecido, yo pensé que Ricardo me iba a llamar a matarme, pero todo lo contrario. Me llamó apenado, preocupado porque mi viejo la haya pasado mal, ni me recriminó nada y lo volvió a invitar. Aunque yo debo reconocer que tuve una discusión fortísima, creo que una de las peores que he tenido en los últimos años con mi viejo.

- A principios de este año se había hablado de la posibilidad de que estés en Bailando por un sueño y finalmente América no te dejó, ¿aceptarías la propuesta si te dejaran?

- No sé bailar pero como experiencia podría ser divertido, América no me dejó pero en un futuro no lo descarto...